Así se intitula el libro de George Orwell, que era el
seudónimo de Eric Arthur Blair, publicado por primera vez en 1938, cumpliéndose
el próximo año 2018, D.m., el 80 aniversario de su primera edición. La que
tenemos nosotros es de Editorial Seix Barral, S.A., 1985, 231 páginas.
Como decíamos en
el artículo anterior, en éste veremos como Orwell nos cuenta las mentiras de
los comunistas sobre los hechos de Barcelona de mayo de 1937. Este libro, como
ya decíamos en nuestro primer artículo trata, entre otras muchas cosas, de la
responsabilidad del partido comunista español y de la extinta URSS en la
destrucción del POUM, así como también nos cuenta Orwell las mentiras y la
discordia que sembraba dicho partido, lo mismo que hace ahora y ha hecho
siempre.
En la página 163
y 164, se lee:
“En la prensa comunista y filocomunista toda la culpa de lo sucedido en Barcelona se
atribuye al P.O.U.M. Los hechos se describen, no como un estallido espontáneo,
sino como una insurrección deliberada y planeada contra el gobierno, organizada
exclusivamente por el P.O.U.M. con la ayuda de unos cuantos equivocados
‘incontrolados’. Más aún, ha sido decididamente un complot fascista, llevado a
cabo cumpliendo órdenes fascistas con el objeto de iniciar una guerra civil en
la retaguardia y paralizar así la acción del gobierno. El P.O.U.M. ‘la quinta
columna de Franco’, una organización trotskista que estaba en connivencia con
los nacionales. Veamos lo que decía el ‘Daily Worker’ del 11 de mayo:
Lo agentes alemanes e italianos que se habían
introducido en Barcelona, aparentemente para ‘preparar’ el nefasto ‘Congreso de
la Cuarta Internacional’, tenían encomendada una gran misión. Ésta era la
siguiente:
En la colaboración con los trotskistas locales, tenían
que provocar una situación de desorden y de violencia que justificase el que alemanes e italianos afirmaran que eran
‘incapaces de ejercer un control naval efectivo de las costas catalanas, debido
al desorden que reinaba en Barcelona, y que, por tanto, ‘no tenían más remedio
que desembarcar tropas en Barcelona’.
El instrumento con el que contaban los alemanes e
italianos no era otro que la organización trotskista conocida con el nombre de
P.O.U.M.
Más adelante, en el mismo artículo, los sucesos de
Barcelona se convierten en ‘el ataque del P.O.U.M.’, y en otro artículo del
mismo número se afirma que ‘no cabe la
menor duda de que la responsabilidad por la sangre vertida en Cataluña recae
sobre el P.O.U.M”.
En el próximo
artículo haremos un resumen, según Orwel, de todas las mentiras vertidas por
los comunistas sobre el P.O.U.M.
Continuará.
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