Hay que “recuperar la memoria
democrática”, oiga. Vamos a ello.
Por mucho que quieran disimular,
negar, ocultar y falsear, el comunismo y el socialismo tienen un denominador
común: su odio a la religión cristiana, y más concretamente a la católica. De
la islámica no comentan nada por razones obvias: el degüello y la lapidación
acabarían con ellos.
Aunque haya ciertas discrepancias
entre marxistas y socialdemócratas, en el anticlericalismo están totalmente de
acuerdo. Esto está sobradamente demostrado cuando el PSOE se convirtió por
primera vez en partido gobernante en la República Española de 1931: su
anticlericalismo quedó perfectamente demostrado, sobre todo durante la
revolución socialista y comunista de octubre de 1934, en la que fueron
asesinados varios clérigos en Asturias y en España.
Esta agresión contra la religión
volvió en noviembre de 1982 durante el “gonzalato” y con la creación del
“Programa 2000” ( I ), presentado en enero de
1990 por Felipe González y por Alfonso Guerra, con el objeto de “adecuar el socialismo a los retos del
futuro”. Tal agresión se vio claramente en los ministerios de Educación,
Cultura y Justicia, y no digamos nada de los “mass-media” en poder del gobierno
y de otros que, aunque fuesen privados, por oportunismo y por otros motivos, se
convirtieron en lameculos y mamporreros de aquel régimen.
Donde más se vio, y se ve esta
agresión, es en el “Ente”, ya saben la TVE que, para el “pueblo soberano”,
constituye el último dictamen: lo dijo la tele, punto redondo. Curiosamente,
Alfonso Guerra, cuando el PSOE aún no había llegado al poder, hizo unas
declaraciones en 1980 sobre la TVE: “Es
un medio de desinformación, una máquina donde meten españoles y sacan
imbéciles, un pesebre de animalitos”. Precisamente el PSOE, una vez ya en
el poder, hizo exactamente todo esto y más.
( I ).- En estos momentos tenemos otros “programas”: el del
2030 y 2050
Continuará.
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