sábado, 24 de agosto de 2024

Conceptos manoseados y manidos ( I )


 

Probablemente sean los conceptos “progresista” y “derechona”, los más manoseados y empleados en épocas de votaciones para encandilar al “pueblo soberano”. Estos conceptos los han utilizado, y utilizan, los dos partidos que han creado los mayores problemas económicos, políticos y sociales de toda la historia de España: el PSOE y el PC. Creemos que merece la pena someterlos a nuestro modesto juicio para demostrar la enorme dosis de demagogia y de logomaquia que se distribuye entre el citado “pueblo soberano” con la intención de captar su voto.

Empezamos por la “derechona”. Toda la culpa es de ella, y en ella se engloban los EE.UU., la Iglesia, Israel, el PP, VOX y un larguísimo etc.

 Esta derechona es a la que se le transfieren todos los males habidos y por haber del pueblo, y a la que se la despeña cual macho cabrío en el efecto  purgante y purificador de la “katarsis griega”, para que con ella mueran todas las faltas y carencias de ese “pueblo soberano”. Y aquí se termina el asunto. No se analizan ni se estudian las orientaciones políticas de esa “derechona”. Esto no interesa. Solamente se la ridiculiza entre risotadas y “pingues de babaya”, parafraseando a Tedodoro Cuesta. Para eso están los miles de mítines perfectamente estudiados. Una vez despeñado el  macho cabrío, el pueblo se sentirá libre y, lo que es peor, volverán a gobernar los mismos, con la consiguiente destrucción de empleo, cierre de empresas, crisis económica, paro galopante, etc, etc.

 Pero al “pueblo soberano” le da igual. No se siente frustrado ni decepcionado al ver y comprobar que después de esas votaciones que se convocaron para solucionar los problemas que se habían cargado sobre la “derechona”, no sólo siguen sin resolverse, sino que aumentan.

 No se cansan de hablar de igualdad, igualdad, igualdad sin darse cuenta que, según de la igualdad de que se trate, sería una inmensa injusticia y que, además, por mor a esa igualdad se puede aniquilar la libertad, con lo cual la cosa sería gravísima.



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