Como ya saben, “Damnatio memoriae” es una expresión
latina que literalmente quiere decir “condena de la memoria”. Se usaba en la
antigua Roma para descalificar y condenar a los enemigos del Estado, una vez fallecidos.
Bien es verdad que el asunto ya se practicaba en los tiempos del Antiguo
Egipto, que fue donde nació. Aquí la cosa era más leve: sólo consistía en
borrar y hacer desaparecer de archivos y monumentos los nombres de ciertos
personajes, sin inculcar odios, mentiras, tergiversaciones, embelecos, etc.
Dicho lo anterior, y como intuirán, la “Memoria
histórica” “zapateril”, convertida ahora en “Memoria democrática” “sanchista”,
es una auténtica “damnatio memoriae”, pero con algunas características más
basadas en poner la bota, el bozal, el grillete, el odio, el terror, la
mentira, amén de intentar suprimir el respeto y la libertad. De todo esto, la
mentira es una de las bases principales. Al respeto decía Mark Twain que “Es
más fácil engañar a la gente, que convencerla que ha sido engañada”.
Tampoco Goebbels se quedaba corto: “Miente, miente, miente, que algo
quedará; cuanto más grande sea la mentira, más gente la creerá”. Y el
monstruoso Lenin: “La mentira puede ser una buena arma revolucionaria”.
¿Qué es la “Memoria democrática “sanchista”? Pues todo
menos memoria o historia. Es, simplemente, una ideología que se quiere imponer
a base de lavar el cerebro al estulto e ignorante “pueblo soberano”, para
aniquilar, arrasar, desmantelar, etc, no solamente el pensamiento, sino la
conciencia, valores éticos y morales y otras cosas. Para ello inculcan unos tópicos
típicos, prototipos y modelos filomarxistas, aunque, claro, de esto el “pueblo
soberano” ni se entera. Con la telebasura, el “furbo” y los “famosos” de tetas
y culos, ya tiene bastante. Gramsci no lo hubiese hecho mejor: la “hegemonía
cultural” está servida. (Sobre Antonio Gramsci recomendamos leer los
artículos “Antonio Gramsci” ( I ) y ( I I ) y “Pequeña antología
política”, insertados en este blog con fechas 23-9-2016, 4-10-2016 y
24-7-2019, respectivamente).
En fin, tal parece que se está cumpliendo la profecía
de George Orwell que cuenta en su famosa obra “1984”, Editorial
Destino, Mayo 2002, 334 páginas, libro comentado en este blog con fecha 26-12-2023,
en la que nos habla de la dominación del “Gran Hermano”, para el que “la
guerra es la paz; la libertad es la esclavitud, y la ignorancia es la fuerza”,
y que cuenta además con la “Policía de pensamiento”, que tiene agentes
secretos por todos los rincones, creando una idioma nuevo, la “Linguanova”,
con el fin de que la gente no pudiera expresarse ni transmitir ninguna idea que
no contara con la anuencia, la aquiescencia y el beneplácito del partido.
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