Esta expresión es un refrán asturiano que quiere decir que ninguna mentira, falsedad, engaño, farsa, invención, falacia, bulo, fraude,
falsificación, añagaza, etc, puede ocultarse para siempre, saliendo a relucir
la verdad cuando menos se espere.
Dicho esto, y como ya sabrán, la última trampa de la
banda que nos desgobierna es el ataque constante a la extraordinaria Isabel
Díaz Ayuso, con el objeto de ocultar las tramas de Begoña Gómez. Tal parece que
Su Sanchidad está más preocupado por el caso Gómez que por el de Koldo.
Los tejemanejes de Begoña, así como sus influencias
con el objeto de favorecer las ayudas, gratificaciones, subvenciones, etc, el
individuo que improvisó e imaginó una cátedra para ella, amén de sus contactos
con Air Europa y de otras cosas, como sus turbios negocios en África, están
saliendo a la luz.
Para que no se conozca todo este entramado “begoñil”,
hay que desviar el asunto. Lo mejor es atacar a Ayuso. Tal parece que esta
banda del desgobierno no se da cuenta, o no quiere dársela, que no es lo mismo
que este desgobierno done subvenciones a empresas avaladas por la esposa del
presidente del desgobierno, que con lo sucedido con Ayuso que no conocía a su
actual pareja.
En fin, lo cierto es que los dos casos son
absolutamente diferentes. Y como dice el refrán astur, “la trampa rescampla”.
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