Como ya hemos dicho en otra ocasión, conocemos a una
“ni-ni-ni” veinteañera, que ni estudia, ni trabaja, ni lo intenta, que dice que
es votante de “Podemos” porque quiere comprarse un “Mercedes”. Probablemente
piense esto viendo el “casoplón” de los marqueses de Galapagar, oiga.
Este disparate, y otros que se oyen a esta juventud
ignorante, son producto de los diferentes sistemas educativos que hubo en
España desde hace casi cuarenta años, que más que sistemas educativos eran, y
son, sistemas de adoctrinamiento político, que permitieron a estos jóvenes muchas
cosas indebidas, entre ellas el tener casi todo sin el menor esfuerzo, sin ser
conscientes de ello, creyéndose que se lo merecen todo. Esto provine del
populismo, de la demagogia y de la logomaquia de esta desastrosa casta política.
Por otra parte, no saben que se les está engañando en
varios asuntos, como por ejemplo sobre la pandemia “coronavírica” y por el
desastre económico y social subyacentes. Ellos van a lo suyo y a sus asuntos,
creyéndose de forma fanática y a pies juntillas, lo que les dicen los “suyos”,
odiando, insultando y maldiciendo a lo que les dicen los “otros”. Para eso
están el rencor, el encono, el resentimiento, la saña y el verbo encizañador de
algunos, algunas y “algunes”, auténticos tóxicos que les hacen permanecer
impasibles ante la desastrosa situación actual de “esta España nuestra”, como
diría la cantante Cecilia.
Pero no se preocupen, se creen a pies juntillas
aquello de “salimos más fuertes”. En fin, son un auténtico rebaño de cautivos,
aunque de esto no se dan cuenta.
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