miércoles, 21 de febrero de 2024

“El Universo desbocado” ( I I )


 

Como ya saben, el asunto del cambio climático es otra nueva “lucha de clases”, que está sirviendo de enfrentamiento entre casi toda la población mundial. Muchas de las cosas que se dicen sobre el tema, poco o nada tienen de científicas.

Vamos a dedicar unos artículos a este asunto comentando el libro “El Universo desbocado”, autor Paul Davies, Salvat Editores S.A., 1985 (Barcelona), 206 páginas incluido “Biblioteca científica Salvat”. El libro consta de 11 Capítulos, amén de 29 láminas en las que se pueden ver fotografías de nebulosas, galaxias, cuásar, etc.

Como en la entrega anterior, seguimos con el Capítulo I. En la página 17 se lee:

“Elbert Einstein, cuyo genio fue comparado al del mismo Newton, publicó en 1906 una nueva teoría del espacio, del tiempo, y del movimiento, llamada teoría de la relatividad. Más tarde, en 1915, amplió la teoría para incluir la gravedad, conociéndose como teoría general de la relatividad. En estas teorías Einstein unificó el espacio y el tiempo en una sola entidad llamada espaciotiempo, con propiedades que producen efectos curiosos e insólitos, algunos de los cuales se discutirán en los capítulos siguientes. La gravedad, en lugar de ser considerada como una fuerza, es atribuida, en la teoría de la relatividad, a la estructura geométrica del espaciotiempo. La presencia de un cuerpo gravitante curva el espaciotiempo de su entorno y es esta curvatura, en vez de alguna fuerza o acción debida al mismo cuerpo, lo que perturba las trayectorias de los demás cuerpos al moverse por el espacio que lo rodea”.

En la página 21 del mismo Capítulo I, se lee:

“En 1965 dos expertos electrónicos americanos, Arno Penzias y Robert Wilson, estaban trabajando para la compañía Bell Telephone sobre sistemas de comunicaciones para satélites artificiales cuando descubrieron accidentalmente lo que podría considerarse como el mayor de todos los descubrimientos científicos, el calor original de la creación. Estaban investigando metódicamente las diversas fuentes de interferencias de radio en longitudes de onda muy cortas, para poder eliminar estas perturbaciones. Identificaron varias fuentes, ruidos parásitos de la radio en la alta atmósfera, interferencias en el equipo amplificador, etc, pero había una fuente de interferencias perturbadora de origen desconocido, una radiación de fondo de microondas que ninguna fuente conocida podía explicar.”

Continuará.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog