Con esta entrega, terminamos con el comentario sobre
el libro de Fernando Savater intitulado “Ética para Amador”, Editorial
Ariel, S.A., Barcelona, 38ª edición: enero 2001, 191 páginas. Esta obra consta
de I X Capítulos, páginas 17 a 165, además de “Aviso antipedagógico”,
páginas 9 y 10, “Prólogo”, páginas 11 a 15, “Epílogo”, páginas
167 a 174, y “Apéndice: diez años después ante un nuevo milenio”,
páginas 175 a 189.
Como decíamos en el anterior artículo, en este último
veremos lo que nos dice el autor en el Capítulo I X intitulado “Elecciones
generales”, páginas 149 a 165. En la 155 nos dice el autor que “para la
política, en cambio, lo que cuentan son los ‘resultados’ de las acciones, se
hagan por lo que se hagan, y el político intentará presionar con los medios a
su alcance – incluida la fuerza – para obtener ciertos resultados y evitar
otros”.
El Capítulo termina con un párrafo de Tomás Moro y
otro de Montesquieu. Transcribimos el de este último:
“Si yo supiese algo que fuese útil y que
fuese perjudicial a mi familia, lo expulsaría de mi espíritu. Si yo supiese
algo útil para mi familia y no lo fuese para mi patria, intentaría olvidarlo. Si
yo supiese algo útil para mi patria y que fuese perjudicial para Europa, o bien
que fuese útil para Europa y perjudicial para el género humano, lo consideraría
como un crimen, porque soy necesariamente hombre mientras que no soy francés
más que por casualidad”.
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