El “chigre”

 

Como hay que “recuperar la memoria democrática” de Su Sanchidad, vamos a ello, oiga.

En un diario de Asturias aparecieron en su día unas declaraciones del ex presidente de dicha comunidad, Tini Areces, en las que decía: “¿Esto qué es, un Estado de derecho o un chigre?”, refiriéndose a quienes le criticaban por el “Caso Marea” y por la gestión del Niemeyer.

Habría que preguntarle a este señor que a qué clase de “chigre” se refería: si al establecimiento donde se reúnen varias personas para tomar una botella de sidra o un vaso de vino, o al otro tipo de “chigre” donde se reúnen los políticos para hacer sus componendas de todo tipo, ya sean de carácter corrupto o manipulador.

En el libro “Secuestro del socialismo”, comentado en este blog con fechas 5 y 6 de diciembre del pasado año 2023, autor Antón Saavedra (sindicalista de UGT), Editorial Libroslibres, 2.004, 472 páginas, incluido el Índice Onomástico, se ve este último tipo de “chigre”

El libro consta de XXXVIII capítulos que, aunque los primeros están dedicados básicamente a la política, la obra puede decirse que se centra y que está dedicada a la corrupción, dando nombre y apellidos de todas las personas que se aprovecharon y fomentaron dicha corrupción.

Merece especial mención las páginas dedicadas a Areces y a José Ángel Fernández Villa. Al primero lo califica de chaquetero, “corrupto y baboso”, mientras que al segundo lo tilda nada más y nada menos que chivato de sus compañeros, ya que, según Saavedra, Fernández Villa era “un topo infiltrado” a las órdenes de Carrero Blanco.

En las páginas 319 y siguientes, se lee:

“En efecto, lo primero que hizo Areces nada más llegar al Gobierno fue encargar la fabricación de un decreto para cesar fulminantemente a Manuel Menéndez como presidente de Cajastur, sustituyéndolo por otro amigo suyo en las conspiraciones comunistas, Paulino García Suárez, que de ocupar un puesto en la Comisión nacional de Mercado de valores pasó a desempeñar el denigrante papel de mamporrero del capo Areces . . .”

Si el señor Areces se refería a este último tipo de “chigre”, no cabe duda de que tenía toda la razón.