Falsos y cínicos.
Como ya hemos dicho varias veces, en los tiempos
republicanos había dos clases de República: la del orden, respeto y libertades,
como la que querían los verdaderos republicanos Marañón, Ortega y Gasset,
Unamuno, Pío Baroja, Pérez de Ayala y un largo etc, y la del crimen y odio,
como la que deseaban Carrillo, Pasionaria, Largo Caballero, José Díaz y demás
troupe prosoviética.
Como ya saben, cuando en aquellos tiempos republicanos
se producía un golpe de Estado, era mirado con distinta óptica, según fuese la
doctrina, pensamiento y credo del golpista. Se podrían poner muchos ejemplos.
Vamos a poner uno por mor de “recuperar la memoria histórica”, pero la
verdadera.
Como recordarán, en Madrid, y en otros sitios más, entre
ellos varias ciudades de aquí de Asturias, se ha quitado el nombre de calles
dedicadas a José Calvo Sotelo, que fue vilmente asesinado antes de comenzar la
Guerra Civil por criminales pertenecientes al PSOE que, junto a los comunistas,
son los que están quitando los nombres.
El principal responsable del golpe de Estado del día 5
de octubre de 1934, Francisco Largo Caballero, el “Lenin español”, tiene una
gran estatua de bronce de varios metros de altura en Madrid. Como ya saben,
dicha estatua fue inaugurada por el PSOE en 1987 con la presencia de Joaquín
Almunia, a la sazón ministro de Trabajo felipista.
Como es notorio, pero no público, el “Lenin español” quería
instalar una dictadura del proletariado, basándose en todo tipo de violencias.
Como muestra de esto, en aquel sangriento golpe de 1934, fueron asesinados casi
40 religiosos, y cientos de militares pertenecientes a las fuerzas del orden.
Además de todo esto, se incendiaron y destruyeron
iglesias e inmuebles religiosos, amén de varios edificios públicos, fábricas,
puentes, etc, etc.
Al mentado “Lenin español”, a pesar de ser el
principal instigador de aquel golpe de Estado, no se le imputó de nada de lo
sucedido, a pesar de haberse encontrado un depósito de armas en la Casa del
Pueblo de Madrid, o sea, en el trono del PSOE.
Como ya saben también, y por aquello de “recuperar la
memoria histórica”, este “Lenin” fue Ministro de la Guerra en el período
comprendido entre setiembre del 36 y mayo del 37. Durante estos meses se
cometieron las mayores bestialidades bajo sus órdenes, destacando la masacre de
Paracuellos, en la que fueron vilmente asesinados miles de presos, con 50 niños
incluidos.
También bajo su batuta se fortaleció el PCE, con el
envío de “asesores” del criminal Stalin, creándose innumerables chekas y
lugares de tortura, llevando a España a convertirse en un subordinado satélite
de la destartalada URSS.
También bajo su égida se enviaron a Moscú 500
toneladas de oro del Banco de España ( I )
Ni qué decir tiene que de todo esto, y de muchas cosas
más, no dicen ni pío los de la internacional de la mentira, del odio y del
terror. Así son de falsos y de cínicos.
( I ).- Recomendamos leer los comentarios sobre el
libro “El oro de Negrín”, insertados
en este blog con fechas 12, 19, 22 y 23 de diciembre de 2.016.
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