Como ya saben, el próximo día 12 de este mes de mayo se celebrarán
elecciones en Cataluña, perdón, “Catalonia”. Las europeas tendrán lugar entre
los días 6 y 9 del próximo mes de junio. Las dos están a la vuelta de la
esquina.
Uno de los requisitos indispensables para que
haya unas elecciones limpias, es el de la libertad. Si no hay libertad, porque
ya se sabe de antemano quién va a ganar (países comunistas), estaremos ante un
simulacro.
Si por otra parte hay candidatos
amenazados, o políticos a los que se les pega una patada en los dídimos, ¿puede
haber unas elecciones normales?
Como de
costumbre, ya empieza, de forma subliminal y a lo zorro, el bombardeo de los
partidos y sus candidatos, con los correspondientes altoparlantes por las
calles, y también en chigres y bares,
caravanas, carteles por doquier, pancartas, pasquines, encuestas,
aplausos, vítores, debates llenos de logomaquia, demagogia y populismo, pactos
de interés, entrevistas entre los líderes y, sobre todo, promesas y ataques al
contrincante político, provocando la crispación del encandilado “pueblo
soberano”
Dicho
todo esto, y como ya saben también, el Artículo 2º. De la Constitución Española
dice:
“La Constitución
se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e
indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la
autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad
entre todas ellas”.
Pues bien, el ínclito e inefable Pedro
Sánchez, cuando era candidato por el PPPSSSOOOEEE ( I ) a La Moncloa, dijo en su borrador electoral que reformaría la
Constitución, cambiando y modificando el Artículo 2º que, como está expuesto,
se refiere a la indisoluble unidad de España.
Según este “monclovita”, lo que le movía
a hacer este cambio era el evitar el enfrentamiento entre elementos de su
partido, ya que unos defienden y sostienen que Cataluña es una nación, y otros
que no lo ven así.
El citado PPPSSSOOOEEE, barajó en su día
dos alternativas para el asunto catalán. Una fue la de admitir e incluir en
dicha reforma constitucional, que Cataluña es una nación, lo mismo que dice el
Estatuto Catalán de 2006, auspiciado por el entonces nefasto presidente “Bobo
Solemne”, y la otra modificar el mentado Artículo 2º.
( I ).- Ponemos
esto por “coherencia”. Ya saben:
el/la/los/las/les/políticos/políticas/”politiques”/jóvenes/
“jóvenas”/ “jóvenos”/, malabaristas/ “malabaristos”/ “malabaristes” . . . Por
tanto, habrá que decir:
Partido/Partida/”Partide”/Socialista/”Socialisto”/”Socialiste”/Obrero/Obrera/”Obrere”/Español/Española/”Españole”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario