Mentir, mentir y mentir. Sí, esto es lo que hace Su Sanchidad constantemente ya que, entre otras cosas, habla y habla del progreso de estos últimos siete años, cuando la realidad es que los españoles tenemos menor renta efectiva y real que en 2018.
Sin embargo, este sujeto y su banda también hablan y
hablan de la crecida de sueldos. Vamos a ver: si un sueldo crece, por ejemplo,
un 10 %, y la cesta de la compra sube un 40% ¿dónde demonios está el progreso?
Lo que hay que hacer es precisamente todo lo contrario: retroceso, regresión, atraso,
estancamiento . . . Es de cajón que,si la subida de sueldos no va escoltada por
la retención y freno de los precios, lo que se está haciendo es mentir, mentir
y mentir.
Por otra parte,
Su Sanchidad y su “complexo” han puesto por las nubes los impuestos, aumentando
el déficit, amén de la deuda pública, encareciendo los productos alimenticios,
los transportes, las vacaciones, la vivienda, los coches, etc, etc. Esto sí que
es el desiderátum.
Que no nos vengan con cuentos de hadas, con
populismos, con demagogias, con logomaquias, etc: la renta verdadera ha
disminuido en toda España. Hoy sabemos que 20 euros no valen para nada. De nada
vale que se ganen muchos euros, si el poder adquisitivo nada tiene que ver con
la ganancia. Si una persona gana 3.000 euros mensuales, y un kilogramo de
manzanas vale 20 euros, por ejemplo, o un litro de aceite 15 euros, por ejemplo
también, y un alquiler de vivienda 1.000 euros mensuales, ¿dónde demonios está
el progreso?
Pero, en fin, “vamos viento en popa a toda vela”,
oiga.


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