El título completo del libro es “Desmontando el progresismo. La izquierda en
sus cavernas”, autora Edurne Uriarte, Fundación FAES, Editorial Gota a
Gota, agosto de 2012 segunda edición, 323 páginas, incluido ÍNDICE ONOMÁSTICO Y
DE MATERIAS. Edurne Uriarte es catedrática de Ciencia Política de la
Universidad “Juan Carlos” y autora de varios libros.
Entre otras cosas, en esta obra se comenta la tolerancia con la violencia por parte de la izquierda que la hace desviarse de los principios democráticos que tanto anuncian, dando a conocer las muchas contradicciones y la enorme influencia que ejerce sobre los “mass-media” al más puro estilo gramsciano. También analiza la autora los tópicos típicos del “progresismo” propios de doctrinas intransigentes y fanáticas.
El libro consta de cuatro capítulos: “En la caverna terrorista”, “En la caverna pacifista”, “En la caverna identitaria” y “En la caverna radical”, siendo este último el que más nos ha impresionado. Este libro, y otros muchos que ya hemos comentado, prácticamente no se ven por las librerías, ya que no forman parte de la “kurtura popular”.
En el primer capítulo, se ven las simpatías por los terrorismos de extrema izquierda, vengan de donde vengan. En el segundo capítulo se habla constantemente de “pacifismo” como contrapeso a la acción “militarista” de la derecha. En el tercero, salen a relucir el “multiculturalismo” y el “feminismo”, es decir, el “multiculturalismo identitario”, que diría el ínclito e inefable Llamazares. Y en el cuarto se ve la total impunidad con la que han actuado, y actúan, los “progresistas.
Dentro del primer capítulo, “En la caverna terrorista”, y con el subtítulo “Comprendiendo a las FARC”, refiriéndose a Hugo Chávez y a Fidel Castro, entre otros, se lee en la página 101:
“Al fin y al cabo, los enemigos de Chávez eran, lo siguen siendo, Colombia y otros Gobiernos democráticos del mundo opuestos a su proyecto de revolución bolivariana que, como ha explicado en varios textos Plinio Apuleyo Mendoza, es su proyecto de socialismo para el siglo XXI. Tal proyecto incluye una relación de Chávez con las FARC que data de 1995, cuando Chávez se adhirió al Foro de Sao Paulo, una organización auspiciada por Fidel Castro y a la que pertenecen, además de gurpos y partidos de extrema izquierda continentales, las FARC y el ELN de Colombia. Resumía Plinio Apuleyo Mendoza la posición de Chávez y otros dirigentes latinoamericanos respecto a las FARC: ‘La verdad es que Correa y Hugo Chávez, además del rústico Daniel Ortega, nunca han visto como terroristas a los autores en Colombia de atroces masacres, atentados, secuestros, tráfico de droga o siembra de minas que han dejado más 3.000 inválidos, entre ellos 600 niños. Considerándolos como camaradas que comparten su sueño revolucionario, los apoyan”92.
92. “Mambrú se fue a la guerra”, ABC, 11 de marzo de 2008
Continuará.
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