Vemos todos los días símbolos
y signos de todo tipo y jaez: desde los que atañen al deporte, hasta los
políticos. Nosotros vamos a hacer una pequeña consideración sobre estos
últimos.
Los signos y los símbolos no
tienen el mismo significado en un país que en otro. Por otra parte, tales
símbolos y signos tienen el significado que se les ha dado con el transcurso
del tiempo, por mucho que se les quiera idealizar.
Es curioso ver cómo los
partidarios de la cruz gamada critican y odian a los de la hoz y el martillo, y
viceversa. En ambos casos, hay poca congruencia y coherencia, ya que estas dos
ideologías, por llamarlas de alguna manera, fueron y son, criminales, opresoras
y dictatoriales. Lo malo es que muchos, muchas y “muches” se sienten identificados
con ellas, pero de forma total y absolutamente incoherente.
Así, el hecho de que
determinados políticos de la “casta” se presenten en mítines, reuniones,
concentraciones, etc, con el puño en alto y cantando la Internacional,
creemos que no son los verdaderos representantes de la clase trabajadora, como
ellos dicen.
Después de haber leído “La
casta. El increíble chollo de ser político en España”, libro comentado
en este blog con fechas 20 y 25 de enero de 2017, sabemos lo que cobran estos
“representantes”, y vemos la brutal y abismal diferencia entre esta gente y
cualquier trabajador. Y si nos metemos en el campo fiscal, la cosa es ya
vergonzante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario