En illo tempore, allá por el año 1978 cuando se
redacto la Constitución, nadie en aquellos tiempos, así como en los actuales,
intentó, ni intenta, arreglar y corregir varios defectos de esta Carta Magna
¿Se acuerdan cuando in illo tempore Felipe González y José María Aznar
negociaban en el Hotel Majestic barcelonés con CiU y el PNV? ¿Cómo es posible
que dicha Constitución admitiese, y admite, conversaciones con partidos
antiespañoles y secesionistas?
Otro aspecto negativo de esta Constitución es el
permitir negociaciones entre los partidos que han sacado más votos, con los que
menos han sacado, algunos de ellos de ridículo. El desgobierno de “Su
Sanchidad” y de Sor Yolanda nada tiene que ver con lo salido de las urnas. Si
estas cosas desapareciesen de dicha Carta Magna, no podría el doctor
Sancheznstein negociar con separatistas, secesionistas y otros.
De todo esto nació la absolución y amnistía para los
bandidos y violadores separatistas, amén de eso que llaman “sí es sí”, amén
también de la reforma de la infracción y delito de malversación.
En fin, las características de “Su Sanchidad”, como
son su ambición sin límites, así como su egolatría, presunción y vanidad, amén
de su rencor, aversión, fobia y odio al PP, además de otras cosas, nos va a
llevar camino del precipicio, por el que ya empezamos a andar algo.
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