miércoles, 27 de abril de 2022

Ver, leer, oír y no callar ( L X ).


 Las próximas entregas de “Ver, leer, oír y no callar”, vamos a dedicarlas al desastroso gobierno del Bobo Solemne, que fue el causante de todos los males que nos aquejan en estos momentos en España, ahora aumentados por el desgobierno de su “Sanchidad”. Hay que “recuperar la memoria histórica”, oiga.

Como ya sabrán, hace unos días el citado Bobo Solemne, con motivo de las próximas elecciones andaluzas, dijo que “de las cosas más difíciles de vencer en Andalucía es el PSOE”, diciendo también que la gestión del gobierno central del PSOE y de PODEMOS, es “difícilmente mejorable”. De la malversación de millones y millones de euros, así como de las investigaciones de corrupciones por más de 5.000 millones, y de los caos ERE, FAFFE, ISIFOTON, etc, no dijo ni mu. Aquí no le interesa “recuperar la memoria histórica”, pero nosotros vamos a hacerlo. Ahí va.

 Como recordarán, los hijos de José Montilla Aguilera, un “catalán” cordobés que fue presidente de la Generalidad de Cataluña entre 2006 y 2010, daban una hora semanal de catalán, diciendo que prefería que sus hijos aprendiesen alemán porque “sólo por eso encontrarán trabajo” ¿Y cuántos españoles no tienen trabajo en Cataluña por no hablar catalán? ¿Tendrían que aprender alemán como sus hijos, señor Montilla? Si esto es así, ¿por qué decretó usted en su día que se impusiese el catalán en los colegios, permitiendo que sólo se dé una hora de español? La mentira, el cinismo y la demagogia quedaron aquí manifiestamente expuestas.

 Como recordarán también, el Gran Timonel dijo allá por el año 2009 aquello de “saldremos de la crisis un trimestre antes o después”.

Posteriormente, la vicepresidenta de gobierno entre 2004 y 2010, María Teresa Fernández de la Vega, afirmaba que España “no va a estar mal dentro de tres años porque ya habremos salido de la crisis” ¡Claro que saldríamos, aunque se perdían 82.000 puestos de trabajo en un mes! Claro que aquello era sólo un “punto de inflexión”, como decía Celestino Corbacho Chaves, a la sazón ministro de Trabajo e Inmigración. Pero no pasaba nada, oiga: a pesar de aquella “crisís” se triplicó la ayuda a la Cuba “democrática” de los sátrapas Castro.

 Continuará.



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