El bastión de un tal Piqué

Ayer domingo 23 de abril, sobre las diez y media de la noche, hemos oído unos estruendosos petardos, acompañados de grandes voces. Un poco asustados, nos hemos asomado al balcón, y comprobamos que tales hechos eran porque acababa de terminar un partido de eso que llaman fútbol (ya saben: 22 personas corriendo detrás de un kilo de aire encerrado en un cuero, espectáculo que es una auténtica morfina del pueblo), entre el Real Madrid y el Barcelona.
Nos vino a la memoria unas palabras que leímos en la prensa en su día, pronunciadas por un pobre ignorante jugador del Barcelona: un tal Piqué que, curiosamente, su segundo apellido es Bernabéu. Pues bien, este sujeto dijo que “El Barça es una manera de enseñar Cataluña en el exterior”, y también “El Barça fue un bastión de la resistencia durante el franquismo”.

No sabíamos que viendo correr a veintidós personas detrás del citado cuero dándole patadas, patadas que también se dan en los dídimos del contrario; tampoco sabíamos que viendo aullar al respetable cuando el mentado cuero entra en el Averno guardado por el Cancerbero; también ignorábamos que cuando los espectadores asistentes al “espectáculo” se enfadan empezando los enfrentamientos, broncas e insultos, llamando algunas veces hijo de puta al árbitro, pues eso, no sabíamos que todo esto es enseñar Cataluña en el exterior.

Además, ¿a qué es “exterior” se refiere este sujeto? Si es a España, los que van al fútbol lo conocerán sobradamente, ya que este pobrecito y los que componían la selección española, que ganó el campeonato mundial, cobraron 600.000 € en su día.

Si ese otro “exterior” se refiere a otros países, no hay nada que “enseñar”, pues la mayoría de los jugadores de este equipo son precisamente de este otro “exterior”.

La segunda frase del “bastión”, demuestra la ignorancia de este individuo ¿Acaso no sabe este tipo que el Barcelona condecoró dos veces a Franco, por el apoyo que prestó al club para la construcción del “Palau Blau Grana”, así como el “Palacio de Hielo”, etc, cuando era alcalde de la ciudad José María de Porcioles, al que el club hizo socio de honor? Seguro que ni sabe quién fue este señor.

Asimismo, ¿sabe quién fue Juan Gich, directivo del equipo e íntimo amigo de Torcuato Fernández Miranda, al que poco le costó presentar ante el Consejo de Ministros las peticiones del club? ¿Sabe, asimismo, que en la reunión del gobierno celebrada en el Pazo de Meriás el 13 de agosto de 1965, se aprobaron definitivamente dichas peticiones, que fueron publicadas en el BOE de 23 de setiembre de ese mismo año?

Probablemente este elemento haya leído un artículo del comunista “culé” intitulado “Barça, el ejército de un país desarmado”, publicado en 1987, en el que se lee “Cuando el Barcelona ganaba un partido de fútbol al Real Madrid, considerado el equipo del gobierno, Cataluña se resarcía un tanto de todas las guerras”. Este párrafo no merece la pena comentarlo. Se comenta por sí solo. No obstante, quisiéramos hacer una matización: ¿a qué gobierno se refiere Vázquez Montalbán? Porque si se refiere al de la II República, el Real Madrid era de ese gobierno del Frente Popular, que incautó el equipo el 4 de agosto de 1936. El diario “Informaciones” lo contaba de esta manera:

“Un club democrático como el Madrid, con un plantel de socios netamente republicanos de izquierda, no podía temer nada. La Deportiva Obrera, que tiene un gran concepto de los principios deportivos, encontró justos los razonamientos de algunos socios, y juntos concibieron un plan que ha sido puesto en práctica y aprobado sin excepción alguna, por todos los sectores deportivos de Madrid. Reunidos socios del Madrid y directivos de la Federación Obrera acordaron designar un Comité directivo que sustituya a la actual Junta directiva. El citado Comité, nombrado ya, está integrado por dos directivos pertenecientes a la Federación Deportiva Obrera. Uno de ellos, era Juan José Vallejo”.
Vean la imagen del equipo en mayo de 1937 saludando puño en alto.

Vean también este vídeo de YouTube con motivo de la inauguración del Nou Camp.(https://youtu.be/Hdc8OAWX-Ys)

Nota.- La foto de la cabecera corresponde a “La Vanguardia española” de 28 de febrero de 1974. Como no podía ser de otra manera, ahora en dicho periódico ya no aparece la palabra “española”.