Empezaremos diciendo que ciertos politicastros de tres
al cuarto, así como los “historieteros” del sistema, tienen la mente obnubilada
por la ignorancia y la mala fe, que dicen lo que saben, pro no saben lo que
dicen. El panel ideológico para algo está, oiga.
En el libro intitulado “Guerra y vicisitudes de los españoles”, escrito por el socialista
Julián Zugazagoitia, Editorial Tusquets, Barcelona 2001, 648 páginas, nos
cuenta el autor muchas cosas que los de la internacional de la mentira, del
odio y del terror, omiten por ignorancia, aunque nosotros pensamos que más que
nada es por mala fe.
Se leen cosas sobre los enfrentamientos y confrontaciones
entre Largo Caballero, Prieto y Negrín, comentando también el “desbarajuste” y el “desorden demencial” que había en el Frente Popular.
En la página 454, nos cuenta Zugazagoitia lo que
pensaba Juan Negrín, ante el panorama secesionista de aquellos tiempos
republicanos parecidos, en ciertos aspectos, a los actuales. Decía Negrín:”
“Esa puede ser una razón para que yo me marche del Gobierno —dijo
rudamente—. No estoy haciendo la guerra contra Franco para que nos retoñe en
Barcelona un separatismo estúpido y pueblerino. De ninguna manera. Estoy
haciendo la guerra por España y para España. Por su grandeza y para su
grandeza. Se equivocan los que otra cosa supongan.
No hay más que una nación: ¡España! No
se puede consentir esta sorda y persistente campaña separatista, y tiene que
ser cortada de raíz si se quiere que yo continúe siendo ministro de Defensa y
dirigiendo la política del Gobierno, que es una política nacional. Nadie se
interesa tanto como yo por las peculiaridades de su tierra nativa; amo
entrañablemente todas las que se refieren a Canarias y no desprecio, sino que
exalto, las que poseen otras regiones; pero por encima de todas esas peculiaridades,
España. El que estorbe esa política nacional debe ser desplazado de su puesto.
De otro modo, dejo el mío. Antes de consentir campañas nacionalistas que nos
lleven a desmembraciones, que de ningún modo admito, cedería el paso a Franco
sin otra condición que la de que se desprendiese de alemanes e italianos”.
No
comentamos nada sobre este párrafo porque se comenta por sí solo.
¿Figurará
esto en la “memoria democrática” de su “Sanchidad”?
Continuará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario