“El único
deber que tenemos con la historia es reescribirla” (Oscar Wilde).
“Algunos
hablan demasiado, pero sin decirlo todo” (Quintiliano.
“Los
envidiosos morirán, pero la envidia es inmortal” (Molière).
“Sin duda no
hay progreso” (Charles
Darwin).
"No hay nada más espantoso que la
elocuencia de un hombre que no dice la verdad."
(Tomás Caryle). Qué bien le viene esto a su “Sanchidad”.
“Recordad que la naturaleza nos ha dado dos oídos y
una boca para enseñarnos que vale más oír que hablar” (Zenón).
“El consejo dado a un necio es como perlas arrojadas
al muladar” (Esopo).
“Dale al villano confianza, y antes de tres días te
pegará en la cara”. Refrán popular.
“Decir veremos y decir quizá, no es
decir ná”. Refrán popular.
“De comerciar a robar, poco va”. Refrán popular.
“Errare humanum est”,
frase latina que puede traducirse por “equivocarse es de
humanos”.
“Un mercader que iba a la feria con su
asno muy cansado, le pegaba a cada momento con la vara para que llegase más
pronto, tanto era el afán que tenía para vender sus mercancías. No pudiendo el
asno caminar más de prisa,, y viéndose castigado tan sin razón, se condolía
interiormente de su suerte, y deseaba la muerte, pensando que después de muerto
tendría al menos tranquilidad y sosiego. Tanto fue su cansancio que al fin
murió, pero aún después de muerto no le dejaron quieto, porque el mercader el
desolló en seguida, y empleó su cuerpo en hacer panderos.
Moraleja: Ninguno debe desear la muerte
para salir de los trabajos en que vive” ( I )
Chiste. Contagio
“En una visita a un manicomio, unos
médicos ven a un demente en cuclillas en el jardín.
.- Es un hombre perfectamente tranquilo –
asegura el director – No tiene más que la manía de creer que es la gallina de
los huevos de oro y de aquí esa postura.
.- Siendo tan pacífico, ¿por qué no lo
envían a su casa?
.- De ninguna manera ¿Y que pusiera los huevos
allí . . .? ( I I )
( I ).-“Esopo. Fábulas escogidas”, Colección Fontana, Edicomunicación, S.A., 1994, página 34.
( I I ).- “Nuevos chistes Chipi y Chope”, Ediciones
Rodegar, Barcelona, 1962, página 35.
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