Hoy vamos a ser un poco
más extensos con los “inmortales” de la RAE, porque el asunto tiene gran
importancia. Hagamos un poco de historia.
Como es sabido, Hispania fue el nombre
con el que los fenicios bautizaron a la península Ibérica, y que posteriormente
utilizaron los romanos, dividiéndola en tres provincias iniciales: la Hispania
Ulterior Baetica, la Hispania Citerior Tarraconensis y la Hispania Ulterior Lusitania. Más tarde crearon las provincias Carthaginense y Gallaecia.
Por otra parte, Hispania era una
mujer joven. Durante la época romana representaba un montón de valores, tales
como tolerancia, libertad, responsabilidad, igualdad, ética, etc. Dicha palabra
Hispania proviene del fenicio i-spn-ya, palabra que está documentada 2.000 años antes de Cristo. Nos llama la atención lo
de “spn”, que podría ser el Spain inglés.
La citada palabra “spn”, que según los “inmortales” es un
lexema, etimológicamente quiere decir “conejo”, aunque en realidad la
traducción exacta sería la de damán, que son unos roedores africanos y de
Oriente Próximo, muy parecidos a los conejos. Pues bien, esta palabra damán, tan
importante, que al fin y a la postre es de donde viene el nombre de nuestra
Patria, ¡¡¡ no figura en el Diccionario de los “inmortales” de la RAE” !!! Pero
claro, son más importantes “culamen”, “tetamen”, “acojonamiento”, “pepero”, “sociata”,
etc, etc, oiga. (¡Ah!, curiosamente tampoco figura “comuniata”)
Volviendo al tema, los romanos designaron a Hispania como
“tierra de conejos”, que en realidad sería “tierra de damanes”. Así nos lo
dicen Cicerón, Catón, e incluso Cayo Quinto Valerio Cátulo.
Dicho todo lo anterior,
la primera peseta oficial se acuñó en el año 1.869, durante el Gobierno
Provisional de Francisco Serrano y el general Prim, quienes retiraron las
monedas que circulaban entonces, reales y escudos, en las que se veían la
imagen de la destronada Isabel II.
Esta nueva moneda, que
estaba inspirada en una del emperador Publio Elio Adriano, se ve escrito
“Gobierno Provisional”. En ella aparece Hispania recostada sobre la península
Ibérica (hay quien dice que sobre los Pirineos), con un conejito en los pies,
que sería un damán, una rama de olivo en la mano y una corona mural sobre su
cabeza. En el reverso se puede ver el escudo acuartelado de Castilla, León,
Aragón, Navarra y Granada. Asimismo, se ven las columnas con el “Plus Ultra” y
otra vez la corona mural que aparece en el anverso.
Conviene recordar que la
corona mural (“corona muralis”), era una distinción militar que los romanos
daban al primer soldado que subía el muro, muralla o fortificación, y colocaba
la bandera como signo de territorio conquistado.
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