domingo, 23 de enero de 2022

“El show de sus señorías” ( 1 0 )


 Y continuamos con este libro. En la página 55 y siguientes se lee:

“Pequeña antología de Azorín”

“En la historia del periodismo parlamentario, corresponde a José María Ruíz el mérito de haber convertido la crónica de Cortes en literatura.. Nadie antes que Azorín había conseguido separar tan nítidamente el relato literario de la vida del Parlamento de la mera información política de las sesiones. Son las suyas crónicas asépticas desde el puto de vista político, en las que el autor se siente atraído por una serie de detalles aparentemente insignificantes que sin embargo reflejan, mejor que el sentimiento del acontecer político, el clima en el que se desenvolvía la vida del Parlamento español a principios de siglo. Escritas en el estilo minucioso de su autor estas crónicas mantienen toda la frescura y la viveza del momento.

Comenzó Martínez Ruíz sus crónicas parlamentarias en el Diario de España a principios de 1904, empleando entonces por primera vez el seudónimo con el que se le conoce. Pasó después a El Imparcial y por fin a ABC. En 1916 formó la colección de sus crónicas bajo el título de Parlamentarismo español. Había asistido a los debates parlamentarios primero como periodista y luego como diputado del Partido Conservador de Maura en 1907, volviendo a ocupar un escaño en el Congreso entre 1914 y 1919, cuando desempeñó en dos ocasiones la Subsecretaría de Instrucción Pública.

El Parlamento ofrece a Azorín el espectáculo en que participan grandes y pequeños personajes de la política de entonces. Lo que le interesa, más que sus ideas políticas o el contenido de sus discursos, es la forma de pronunciarlos, sus maneras, sus gestos, su aspecto físico. Y nunca deja de ser Azorín el pequeño filósofo a quien las sesiones de la Cámara sugieren reflexiones sobre todo lo humano y lo divino”.

En los tres próximos capítulos, “Ábrese la sesión”, “El silencio y el énfasis” y “He aquí un político”,  veremos la chispa de Azorín al narrar las sesiones del Parlamento.

 Continuará.



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