El verdadero Marx ( I I )

 

Como decíamos en la anterior entrega, en las próximas veremos algo sobre el pensamiento de Marx.

Poco o nada se comente que este judío tuvo contactos con muchos pensadores y filósofos, de los que copió varios asuntos, y que influyeron en su pensamiento.

Quizá el que más influyó en él haya sido el filósofo alemán Ludwig Feuerbach, que fue el padre del ateísmo teórico, como lo demuestra su obra “Esencia del Cristianismo”, publicado en 1841. En esta obra el autor critica de forma drástica y tajante la religión, diciendo que la ciencia de Alemania podía ser capaz de suplantar a la iglesia en el asunto racional.

Marx pensó que si la religión había sido fundada y establecida por el ser humano, tenía que ser éste el gestor para eludirla. Para este menester había que utilizar las críticas de carácter filosófico, amén de los análisis científicos, con el objeto de edificar a partir de éstos una nueva racionalidad.

Otro personaje que animó y confortó el pensamiento de Marx, fue Charles Darwin por su obre “El origen de las especies”, Edicomunicación S.A., año 2001, 479 páginas, incluido Índice, libro comentado en este blog con fechas 19, 21, 22 de febrero de 2020. Esta obra fue publicada en 1859, trayendo todo tipo de interpretaciones comentarios y observaciones: partidarios, admiradores y contrarios discutían entre ellos sobre el libro. Como ya se sabe, aunque los de la internacional de la mentira, del odio y del terror, lo nieguen y lo oculten, Darwin jamás negó que existiera un “Primer Artífice Supremo”. En la última página dice Darwin que “. . . la vida, con sus distintas facultades, fue originariamente alentada por el Creador . . .”

En estas circunstancias publicó en Londres “El manifiesto comunista” en febrero de 1848, en el tomó parte su fiel amigo filósofo y politólogo alemán Friedrich Engels, ricachón acaudalado capitalista, ya que tenía varios negocios en Inglaterra. Pero era igual: el enfrentamiento entre patronos y proletariado estaba servido.

En sus sucesivas ediciones, le documento fue ganando simpatizantes, editándose nuevamente en Alemania en 1850, pasando a Inglaterra, a Suiza, a Rusia en 1863, a Estados Unidos y a Francia en 1873, siendo admitido este “Manifiesto” por la I I Internacional Socialista creada en 1889.

En la próxima entrega veremos cosas que se leen en dicho “Manifiesto comunista”

Continuará.