sábado, 3 de septiembre de 2022

La que nos espera va a ser gorda


 Decía un pedante marxista infumable, que tenía la mente completamente estabulada por el pensamiento único marxista-leninista, “yo tengo mucho de científico”. Sin comentarios.

Estos sujetos, sujetas y “sujetes” del pensamiento único, han metido en el coco del “pueblo soberano” que todos, todas y “todes” somos iguales, siendo igual también lo auténtico y lo certero, que lo artificial, falso y ficticio, diciendo también que todo aquello que no coincida con sus planteamientos, son cuentos de hadas y cantos de sirena.

Para estos, estas y “estes”, los malhechores, los bandidos, los agresores, los asaltantes, etc, y las víctimas también son iguales. Por otra parte, exigen todo tipo de derechos, pero de obligaciones caca de la vaca flaca, amén de no querer saber nada de valores éticos y morales, ni de la educación, ni de la verdadera cultura y, por supuesto, de la verdadera Historia.

Lo peor del asunto es que estos, estas y “estes”, están metidos en todos los terrenos, ya sean políticos, económicos, sociales y en los mass-media. Para esta gente los servicios y medios públicos son un pilar de sus planteamientos, pero nunca los usan. Para eso están los coches privados, las clínicas privadas y los colegios privados a los que envían a sus hijos.

Son partidarios de la “okupación”, pero cuando sus viviendas son “okupadas” protestan y denuncian, como hizo Pablo Iglesias con su vivienda de Casavieja (Ávila) ¿Se acuerdan?

En el terreno político-social, estimulan e impulsan el rencor, la tirria, la inquina, el odio ,etc,  a todo lo que huela a la religión cristiana (de otras no dicen ni mu).

En fin, si dichos sujetos, sujetas y “sujetes” siguen campando por sus respetos dentro “de los muros de la Patria mía”, la que nos espera va a ser gorda.



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