sábado, 15 de octubre de 2022

Sobre la I I República Española “Memoria democrática” ( I )


 Como estamos en el mes de Octubre, tan “admirado” y recordado por los rojo-republicanos, vamos a recuperar algo de la “Memoria democrática” de su “Sanchidad”.

Como ya saben, sobre la Guerra Civil Española se han escrito libros y libros llenos de eufemismos utilizados de forma intencionada para evitar contratiempos políticos, cambiar opiniones y manipular la Historia, convirtiéndose dichos eufemismos en auténticas y despreciables mentiras.

 Se sabe que la Historia es la maestra de la vida, de las personas y de los pueblos. El peor enemigo del hombre es la ignorancia, siendo la más grave la ignorancia histórica.

 A pesar de que la historiografía sobre la II República Española y la Guerra Civil en la actualidad es abundante y espléndida, sobre todo por la apertura de los archivos secretos de la derrumbada URSS, a las nuevas generaciones de españoles se las está sometiendo a un bombardeo mental desde los “mass-media” y desde los centros educativos, tergiversando, calumniando, difamando y mintiendo sobre los hechos recientes de la historia de España. Se intenta por todos los medios obturar la verdad sobre lo ocurrido durante la II República y la contienda civil.

 Dadas las extraordinarias posibilidades actuales de los medios de comunicación, la manipulación es tremenda, gigantesca y devastadora. Esta manipulación no es solamente en lo concerniente a aquel período, sino que se nota en todos los órdenes del momento actual: en el político, en el cultural, en el histórico, en el religioso, en el social, etc. Todo esto amenaza con destruir, o cuanto menos desfigurar, nuestra historia y nuestros fundamentos y raíces culturales. En lo religioso y en lo social, es donde la campaña se nos presenta más virulenta y estremecedora: hay que devaluar, ridiculizar y erradicar todo tipo de creencias y costumbres que tengan algo que ver con la religión.

 Dicen que la Historia, habitualmente, la escriben los vencedores. En el caso de España, paradójicamente, es al revés. Pocas veces se ha mentido tanto, se ha desfigurado tanto, se han retorcido tanto los hechos, con tanta intensidad y desfachatez.

 Los comunistas no callan con “la reconciliación que en su día propuso el PCE”. También se les llena la boca con las palabras tolerancia y el respeto. Pero tales palabras se convierten en huecas cuando se trata de narrar los acontecimientos de aquella época. 

 Los asalariados de lo políticamente correcto, los submarinos gramscianos  infiltrados en los medios informativos, políticos, culturales, etc, no cejan, con contumacia y terquedad zumbona marxista, de presentarnos el tiempo que duró II República Española como el más democrático, el más culto, el más progresista y el de más libertad de toda la historia de España. Mienten. Decía el gran historiador D. Antonio Ponz (1725-1792), Secretario General de la Academia de Bellas Artes, entre otros títulos, que "la veracidad es un deber moral cuyo cumplimiento afecta a la dimensión social del hombre y facilita la convivencia “humana".  Produce indignación tanta incoherencia, tanto ocultamiento, tanta manipulación y tanta mentira.

 Como ejemplo paradigmático de incoherencia se puede poner el siguiente: si la II República Española era todo democracia y libertades, ¿cómo es que ninguna democracia occidental la apoyó? ¿Cómo se entiende que el único apoyo que recibió partió del “gran demócrata” Stalin?

 Continuará.



 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog