Durante el “alcaldesato” de
Madrid de la comunista Manuel Carmena entre los años 2015 y 2019, en el 2016
ocurrió lo siguiente. Hay que recuperar la memoria democrática de su “Sanchidad”,
oiga.
Como recordarán, en el barrio de
Tetuán madrileño se ha visto en dicho año 2016 una exhibición de títeres con el
beneplácito y aquiescencia del ayuntamiento en manos de comunistas. El
espectáculo “guiñolesco”, para celebrar las fiestas de carnaval, y según
testigos presenciales, fue todo un dechado de escenas violentas, asesinatos,
violaciones, ahorcamientos, robos, etc. El asunto llegó a su culmen cuando una
de las marionetas exhibió una pancarta con “Gora ETA”. Sin comentarios.
Por otra parte, comentar que en
este asunto también tuvo su responsabilidad el PPSSOOEE, ya que sus votos en
el Pleno hicieron que se mantuviesen en el ayuntamiento los comunistas de
“Ahora Madrid-Podemos”.
Las reacciones de los
dictadorzuelos de esta “formación” no se hizo esperar. Así, Ada Colau,
alcaldesa de Barcelona, valiéndose de las redes sociales de Internet,
prohibidas en todos los países comunistas y en otros teocráticos, publicó una
nota en Facebook apoyando a los titiriteros.
Por su parte, Pablo Iglesias, en
su cuenta de Twiter, transmitió mensajes de “solidaridad” con los actores. Por
lo visto las víctimas del terrorismo de los etarras, le importan un bledo, dos
cominos y tres dídimos.
Como no podía ser de otra manera,
estos “podemistas” recurren a la “libertad de expresión”. Pero, claro, callan
como zorros, y no dicen nada, sobre los presos políticos venezolanos, cubanos o
norcoreanos.
Por otra parte, comentar que
estos “podemistas”, y la izquierda en general, pueden hacer “escraches” a
tutiplén, pero en el momento que se les critica por algo, lo consideran
“antidemocrático”. Es la “democracia” del marxismo-leninismo.
Sobre esto de los “escraches”
conviene recordar lo que decía el “podemita” Monedero en 2013: “Escrache es democracia”. Es decir, el
progresismo izquierdista puede acosar todo lo que se le antoje, pero una
persona que defienda a las víctimas de ETA, o que critique el aborto, o la
exhibición titiritera de la que estamos hablando, se la califica
automáticamente con lo de siempre: fascista, retrógrada, reaccionaria,
partidaria de la conspiración judeo-vaticana y demás lindezas marxistas-leninistas.
Por aquello de “recuperar la
memoria democrática”, conviene recordar el “escrache” que hicieron los
dirigentes “podemitas” en el 2010 en la Complutense a Rosa Díez, a la sazón
diputada de UPyD, impidiéndole que ejerciese la libertad de expresión de la que
tanto hablan estos engañabobos. “Recuperar” también lo que la leninista Manuel
Carmena decía en 2013: “Los escraches son
una protesta no sólo legítima sino necesaria”.
Por otra parte, Celia Mayer,
concejala de “cultura” del ayuntamiento madrileño, responsable también del acto
“guiñolesco”, ha manifestado que “Es
un ataque contra la democracia el que las instituciones judiciales se estén
utilizando como herramienta contra este Gobierno municipal”.
Parece que esta “sujeta” tampoco tiene idea de lo que
debe ser la justicia en una nación verdaderamente democrática, y no en una
comunista o teocrática: la función de cualquier tribunal es atender a cualquier
ciudadano que ha recurrido a ellos por verse lesionados o mermados sus derechos
o, como en el caso que nos ocupa, denunciar algo sancionable hecho por
cualquier persona, aunque sea política.
Y para terminar una cosa curiosa ¿Se acuerdan de la “gala”
de los premios Goya de dicho año 2016? Allí apareció “El coleta” vestido de smokin y con
pajarita Curioso ¿verdad?
Nota.- Foto tomada de “ecodiario.eleconomista.es”
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