Como decíamos en la anterior
entrega, como estamos en el mes de Octubre, tan “admirado” y recordado por los
rojo-republicanos, vamos a recuperar algo de la “Memoria democrática” de su “Sanchidad”.
Por aquellos años, la URSS era el
totalitarismo personificado con su terror policial, deportaciones, procesos
stalinistas, etc. Viendo esto, ¿cómo es posible que haya gente en la actualidad
que crea que de aquel inmenso GULAG pudieran ser enviados a España agentes,
asesores, militares, policía secreta, material bélico, etc para defender la
democracia y la libertad? ¿Alguien cree que las Brigadas Internacionales
llegaron a España para salvar una República democrática y liberal? Vinieron
para cumplir las órdenes de Stalin, uno de los mayores genocidas de la Historia
¿Cómo explicar que “Koba”, que ayudaba a España a luchar “contra el fascismo”,
firmase un pacto con el nazi-fascista Hitler en 1938?
En cuanto a ocultamientos,
casi nadie dice que la República sufrió tres alzamientos anarquistas, dos
intentos de golpe de estado por parte de Azaña y otro intento protagonizado por
Santiago Carrillo.
En lo referente a mentiras,
se podrían mencionar miles y miles de ejemplos. Pongamos algunas para ilustrar.
Cuando fue incendiado el convento de los religiosos de la calle La Flor de
Madrid, el periódico izquierdista de aquel entonces “Heraldo de Madrid”,
escribía que “los frailes de la Flor habían disparado sobre los obreros”.
Y otro periódico, “La Voz”, decía que todo lo ocurrido no era “más que una
maniobra monárquica aprovechada por los elementos enemigos del régimen”,
idea que defienden en la actualidad algunas personas. Varios periódicos
publicaron que un comité monárquico “compuesto por gentes adineradas y por
canónigos se había dedicado a repartir hojas subversivas para excitar al pueblo
a destruir los edificios religiosos, complicando su programa con anónimos a los
conventos y casas particulares”. O también, que la tripulación del crucero
“Almirante Cervera”, que cañoneó Gijón, “estaba compuesta por curas”. ¿Y
qué decir del reparto de caramelos envenenados que los religiosos hacían entre
los niños? Más infamia, odio y mentira no caben.
Sin embargo, se silencia el
clima irrespirable de los años 30. Se silencian los enfrentamientos violentos
en las calles, las amenazas en el Parlamento, los asesinatos alevosos de
religiosos, la quema de conventos, etc. Se silencia que la República resultó
inviable por su incapacidad para consolidarse como un régimen democrático. Se
silencia que fue excluyente con las derechas, las cuales perdieron toda
posibilidad de gobernar. También se silencia que la República feneció porque,
en su seno, se desató un proceso revolucionario que tuvo dos vertientes: la
marxista y la anarquista. Se omite también que la revolución desatada en la zona
frentepopulista, fue la lógica consecuencia del proyecto final del Partido
Comunista, como lo demuestran los documentos de la URSS. Dicho partido aspiraba
a asumir la hegemonía política mediante las directrices de la KOMINTERN y las
decisiones finales de Stalin. También la progresiva sovietización de la zona
frentepopulista, con purgas incluidas, es otro hecho silenciado, si bien
algunos estudiosos extranjeros como Burnett Bolloten o David T. Catell, ya lo
habían puesto de manifiesto.
Sin embargo, se tuvo que
esperar hasta “hoy” para que, después de las investigaciones sobre las fuentes
soviéticas, se confirmara la realidad y la gigantesca propaganda que ocultó
todo aquello. Los autores R. Ardoz, M. Habeck y G. Sevostianov en su obra “España
traicionada”; A. Elorza y M. Bizcarrondo en “Queridos camaradas”;
Stanley G. Payne en “Unión soviética, comunismo y revolución en España,
1931-1939”,
libros comentados en este blog, así como las obras de Pío Moa y los trabajos
sobre la represión republicana de César Vidal, aportan datos suficientemente
esclarecedores.
Las conclusiones son contundentes:
los “consejeros” rusos trabajaron por la sovietización de España con el
beneplácito del PCE, siguiendo las instrucciones del VII Congreso de la
Komintern celebrado en 1.935. Los testimonios aportados al respecto son inapelables.
Para la Pasionaria el objetivo que se perseguía era una “república
parlamentaria de nuevo tipo”. El secretario de la Komintern,
G. Dimitrov, decía en 1.947 que “España fue el primer ejemplo de una democracia
popular”. En 1.984 Santiago Carrillo decía: “es claro que si la
República hubiera vencido habríamos sido el primer ejemplo de una democracia
popular”.
No cabe duda de que el
desarrollo normal de la República se vio truncado por este proyecto
revolucionario que proponía la implantación del socialismo real,
es decir, el comunismo.
En el sector del PSOE
controlado por Largo Caballero (“El Lenin español”) se pedía la bolchevización
del partido. A tal efecto el propio Largo decía el 24 de Enero de 1.936: “llamarse
socialista no significa nada, hay que ser marxista. Queremos establecer la
dictadura del proletariado, no para reformar, sino para transformar el régimen
actual”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario