miércoles, 1 de febrero de 2023

Historia, no historieta, “Sanchidad” ( I I )


 

Y seguimos con el tema de lo acontecido en aquella nefasta Segunda República Española que fue un “legado de luz”, según manifestó su “Sanchidad” en su día por aquello de “recuperar la memoria democrática” suya, y la “memoria histórica” de su colega Zapatero.

Para hacer un verdadero comentario sobre el tema, hay que ver cómo estaba la situación no solamente en España, sino en Europa que, en aquellos tiempos, y sobre todo en la época que estamos tratando en estas entregas, es decir, en el año 1934, se vivían tiempos muy agitados y confusos. Fueron varios los motivos de esta situación, pero el principal fue la actuación de la izquierda, que a la sazón estaba dividida en dos bandos: la que apoyaba la I I I  Internacional, o Komintern, fundada de 1919 en Moscú por iniciativa y decisión del monstruoso Lenin y de los bolcheviques, y la que estaba en contra del otro monstruo, es decir, de Stalin.

En noviembre de 1933, la CEDA (Confederación Española de Derechas Autónomas), fue el partido más botado, aunque esto no le sirvió de nada para gobernar en solitario, limitándose a apoyar en el Parlamento al gobierno de Alejando Lerroux, líder del Partido Republicano Radical, que en abril de 1934 dimitió como presidente del Consejo de Ministros por desacuerdos y desavenencias con el presidente de la República Niceto Alcalá Zamora.

Por otra parte, el PSOE hacía tiempo que estaba fraccionado en tres tendencias, que luchaban por dirigir el partido y la UGT, que era, y es, su sindicato, que a la sazón era el segundo sindicato después del anarquista CNT.

A principios de 1934, Largo Caballero, el Lenin español, que era el dirigente de la tendencia más radical, comienza sus enfrentamientos con Indalecio Prieto y con Julián Besteiro, que nada tenían que ver con el radicalismo de Largo, ya que eran mucho más moderados. Este individuo, con el apoyo de las Juventudes Socialistas, si hizo con el mando y control tanto del partido como del sindicato. Su intención era, según había manifestado, deshacer la República parlamentaria e implantar e instaurar, valiéndose de una revolución, una república socialista.

Pese a la rivalidad entre anarquistas y comunistas, Largo Caballero les plantea la formación de una coalición obrera de carácter revolucionario, no siendo aceptado esto por los anarquistas, ya que consideraban que ellos tenían suficiente poder para destruir la República. Esto hizo que largo Caballero y sus partidarios, comenzasen a preparar la revolución.

Durante el mes de setiembre, fueron descubiertos en Asturias, Madrid y Vascongadas, principalmente, alijos de armas ligadas a personas allegadas y afines al PSOE.

El 4 de octubre de 1934, el mismo día en el que se había constituido el gobierno de Lerroux, el sindicato socialista UGT llama a una huelga subversiva y revolucionaria que empezaría por la noche de ese mismo día. En Madrid, varios participantes huelguísticos intentaron asaltar la presidencia del Gobierno, y en Vascongadas fue asesinado el ingeniero Marcelino Oreja Elósegui.

La revolución solamente tuvo éxito en las zonas mineras de León y en Asturias, que en aquel tiempo era la mayor región minera de España. La idea de una revolución caló rápidamente en los mineros. 

Continuará.

Nota.- La bibliografía de este escrito, y de los que veremos sucesivamente, es la siguiente, bibliografía que recomendamos a su “Sanchidad” para que la lea. Estos libros los tenemos comentados en este blog.

“1934: Comienza la Guerra Civil”; “1936. Fraude y violencia en las elecciones del Frente Popular”; “40 preguntas fundamentales sobre la Guerra Civil”; “Adiós España. Verdad y mentira de los nacionalismos”; “Así destruyó Carrillo el PC”; “Carrillo miente”; “Checas de Madrid”; “Con la piel de cordero”; “Diplomático en el Madrid rojo”; “Dolores Ibarruri, Pasionaria”; “El bulo de los caramelos envenenados”; “El caos de la I I República. Breve historia de los hechos que antecedieron a la Guerra Civil"; “El caso Orlov”; “El desplome de la República”; “El expolio de  la República”; “El Himalaya de mentiras”; “El libro negro de Carrillo”; “El libro negro de la izquierda española”; “El mito de la izquierda”; “El oro de Negrín”; “El terror rojo en España. Epílogo el terror blanco”; “El tren de la muerte”; “El zorro rojo”; “España traicionada. Stalin y la Guerra civil”; “Historia oculta del PCE”; “Históricamente incorrecto”; “Hombres made in Moscú”; “La batalla de Madrid”; “La gran estafa”; “La noche que mataron a Calvo Sotelo”; “La prensa en la Segunda República Española”; “La República de Azaña”; “La República del crimen”; “La semana trágica de la Iglesia en España (8-14 octubre de 1931)”; “La Unión Soviética y la Guerra Civil Española”; “La velada de Benicarló”; “La verdadera historia del PSOE. De Pablo Iglesias a Zapatero”; “Las checas del terror”; “Los (des) controlados de Companys”; “Los horrores de la Guerra Civil”; “Los mitos de la Guerra Civil”; “Mañana España”; “Matanzas en el Madrid republicano”; “Paracuellos del Jarama: ¿Carrillo culpable?”; “Paracuellos-Katyn”; “Por qué fracasó la I I República”; “Retaguardia roja”; “Una historia de la Guerra Civil que no va a gustar a nadie” y “Unión Soviética, comunismo y revolución en España”.

Dejamos como último libro, “Con el amor en el perdón”, autora María Asunción Sotillos Rubio, que nos cuenta la brutal persecución religiosa de aquellos años republicanos. Este libro lo estamos leyendo y lo comentaremos en breve.




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