Suponemos que se acordarán de aquella gran película
intitulada “Objetivo Birmania”, dirigida en 1945 por Raoul Walsh y
protagonizada por Errol Flynn, tema de la Segunda Guerra Mundial. Pues ahora
estamos en tiempos parecidos, pero por otro asunto: Objetivo España, pero no
para su conquista, sino para su destrucción. La rendición de Su Sanchidad ante
el fugitivo de Waterloo “Carlas” Puigdemont Casamajó, traerá unas consecuencias
terribles para España.
Lo primero que va a desaparecer es la Constitución, lo
que conllevará a la desaparición también del Estado de Derecho. Todo esto, y
más cosas, lo saben Su Sanchidad, Sor Yolanda, amén del “complexo” de Junts,
ERC y Bildu. En una palabra: la extrema izquierda, junto con el separatismo,
han tomado las riendas. La que nos espera es gorda: inseguridad jurídica,
desaparición de inversiones extranjeras, amén del desvío social, político y
económico.
El Doctor Sancheznstein, impresentable sujeto, por mor
de su “embestidura” ha vendido a España por siete peanas para seguir en la
poltrona monclovita. Como es obvio, no está de acuerdo con otras elecciones
porque quedaría barrido: prefiere reverenciar al fugitivo de Waterloo.
En fin, esperamos y deseamos que todo esto no suceda.
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