Vamos a dedicar unas entregas a personajes de aquella nefasta República Española. Casi todos ellos se caracterizaron por su anticlericalismo, y por haber huido cobardemente a Argelia, Francia, México, la URSS, etc. A pesar de su odio a la religión, algunos murieron católicos, como por ejemplo Azaña, la Pasionaria o Companys, aunque este detalle es negado y omitido por los de la internacional de la mentira, del odio y del terror.
Hoy veremos una primera entrega sobre Juan Negrín, que fue también un nefasto personaje de aquellos tiempos republicanos y “Hombre made in Moscú”, parafraseando el título del libro “Hombres made in Moscú”, autor Enrique Castro Delgado, comunista español y comandante del Quinto Regimiento, Ediciones Luis de Caralt, 1963, 659 páginas, incluido índice. Este libro lo tenemos comentado en este blog con fechas 23, 25, 26, 27, 28 y 29 de noviembre de 2.017.
Juan Negrín nació el 3 de febrero de 1.892 en Las Palmas de Gran Canaria y murió en París en 1.956. Era hijo de un riquísimo hombre de negocios canario, tal como indica la indemnización de varios millones que en su día entregó Belloch a su familia. Curiosa indemnización a los descendientes de un hombre que había saqueado el Banco de España. Además, cuando Azaña llegó a Francia, Negrín quiso que el alcalaíno firmase un decreto para enajenar todos los bienes del estado español en el extranjero a una sociedad anónima creada por los socialistas. Azaña se negó rotundamente ya que no quería pasar a la historia “como salteador del patrimonio nacional”. A pesar del ejemplo de Azaña, Negrín y sus compinches se alzaron con inmensas fortunas.
Durante los casi dos años de su gobierno, tiene lugar la masiva presencia soviética en España con su “ayuda política” y militar, con “asesores” y comisarios de la Internacional Comunista con el objetivo, por parte de Moscú, de influir decisivamente en la dirección política de la República de acuerdo con los intereses de Stalin. La situación llegó a tal extremo que el embajador soviético en España, Rosenberg, en colaboración con los miembros de los servicios secretos que la derrumbada URSS tenía en nuestra patria, amenaza con no utilizar los aviones soviéticos en las batallas que sus “asesores” no consideran importantes y llegando a exigir que ciertos ministros y algún que otro mando militar dimitiesen. Semejantes injerencias eran permitidas por el gobierno Negrín. Tal sería el caso, por ejemplo, de que los “consejeros” militares soviéticos convencieran al nuevo jefe de gobierno, Negrín, y al ministro de defensa, Prieto, para desencadenar una ofensiva cerca de Madrid (Brunete) ya que, en una entrevista celebrada entre Azaña, Negrín y el general Vicente Rojo, éste hacía un análisis muy pesimista de la situación militar en la zona republicana.
Otro ejemplo es de que el día anterior a la sublevación de Casado, Negrín nombra jefe de la base naval de Cartagena al comunista Francisco Galán. Según Fraser, los comunistas estaban “aún más firmemente al mando”: asaltaron la Central Telefónica de Barcelona con tres camiones de guardias armados capitaneados por el jefe de la Policía, el comunista Rodríguez Salas y, en colaboración con la policía secreta soviética, torturaron, secuestraron y asesinaron al dirigente del POUM Andrés Nin. El historiador Beevor lo explica muy bien: el nuevo gobierno abrió el camino a “la policía secreta controlada por la NKVD en su persecución de quienes se oponían a la línea de Moscú y sacrificó al POUM a Stalin, afin de mantener el suministro de armas”.
La sumisión del gobierno de Negrín a los intereses soviéticos, está claramente explicada en la obra “España traicionada. Stalin y la guerra civil”, Editorial Planeta, páginas 262 y 263, en el apartado intitulado “El gobierno Negrín y la guerra contra el POUM”, así como en la página 70. Este libro ya lo hemos comentado en este blog con fecha 28 de diciembre de 2.016.
También en otras obras tales como “Queridos camaradas” de Antonio Elorza y Marta Bizcarrondo; “Los españoles de Stalin”, de Daniel Arasa; “Historia oculta del PCE”, de Joan Estruch; “Miseria y grandeza del Partido Comunista de España 1939-1985”, de Gregorio Morán; “Un coronel llamado Segismundo: mentiras y misterios de la guerra de Stalin en España”, de Francisco Félix Montiel; “Una historia de la guerra civil que no va a gustar a nadie”, de Juan Escalante Galán; “Matanzas en el Madrid republicano”, de Félix Schalayer; “La guerra civil española. Una reflexión moral 50 años después”, de Ramón Tamames; “La república española y la guerra civil (1931-1939)”, de Gabriel Jackson; “El exilio fue una fiesta”, de Carlos Semprún Maura, libros estos también comentados en este blog, dan cuenta del filosovietismo de Juan Negrín López.
Pinchen en el siguiente enlace:
Las joyas que se llevaba Negrín
Nota.- Recomendamos leer nuestros comentarios sobre los libros “La gran estafa” ( I ) y ( I I ), insertados en este blog con fechas 14 y 19 de diciembre de 2.016, y “El oro de Negrín” ( I I ), ( I I ), ( I I I ) y ( I V ), también insertados en este blog con fechas 12, 19, 22 y 23 de diciembre de 2016.
Patria y Unidad
Continuará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario