Y seguimos con
las palabras y frases profundas pronunciadas por el atornillado patrón del
“Bribón”.
Además de las
reseñadas en nuestro artículo anterior, y según publicó el diario “El País” en
su día, el augusto ha dicho que las “serias medidas de política económica”
que ha emprendido el Gobierno “ya han
comenzado a dar sus frutos, mejorando la productividad y la competitividad”.
No
cabe duda de que estas palabras se las ha dictado el gobierno de turno. ¿No ve
este sujeto que teníamos en aquellos tiempos un sistema bancario medio en ruina
y al borde la quiebra, con una sanidad y educación desastrosas, con unos
impuestos exagerados, todo esto precisamente por mor de dicho sistema bancario?
¿Cómo es posible que se pueda decir esto cuando el paro sigue y sigue subiendo?
Asimismo, ¿no se da cuenta este augusto de la que hay montada con los bancos y
cajas que viven del dinero de los contribuyentes sin percibir nada a cambio?
¿Tampoco se da cuenta de la disminución del consumo privado y del derrumbe de
las exportaciones? ¿No sabía dicho augusto que la deuda pública andaba por aquel
entonces cerca del 110 % del PIB?
Si
estas cosas, y otras, no las sabes, “¿por
qué no te callas?” Con cazar elefantes y osos seguro que mejoran “la productividad y la competitividad”
Viendo
todo este panorama, verdaderamente dan ganas de llorar.
Y
terminamos con un párrafo de Menéndez Pelayo que, aunque se refiere a la época
de la Guerra de la Independencia, viene como anillo al dedo a los tiempos
actuales:
“Sobre España había pasado un siglo entero
de miseria y rebajamiento moral, de despotismo administrativo sin grandeza ni
gloria, de impiedad vergonzante, de paces desastrosas, de guerras en provecho
de niños de la familia real o de codiciosos vecinos nuestros”
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