Como ya hemos escrito varias veces, decía el
monstruoso Lenin que la mentira podía ser una buena arma revolucionaria. Los
tiempos que ahora vivimos en manos de su “Sanchidad”, tal parece que corroboran
el dicho leninista, además de manejar y maniobrar todo tipo de libertades, ya
sean políticas, sociales, económicas, etc. Una verdadera democracia no puede
funcionar bien sin pluralismo de los “mass-media”.
Este desgobierno social-comunista maneja de tal manera
la ignorancia del “pueblo soberano”, mediante la desinformación, el cuento, el
chisme, el cotilleo, el chismorreo, etc., que dicho pueblo es capaz de ver
blanco donde hay negro, y viceversa. Como dice la muletilla de ahora, esto es
lo que hay.
El asunto proviene por la carencia de valores éticos y
morales de esta casta de politicastros, amén de carecer de cualidades, de
facultades, de juicio, de capacidad, de voluntad, etc, para evitar que se dañe
la verdadera democracia, amén de dañar también las instituciones, lo que
acarrea que se deteriore y se perjudique la vida de millones de españoles.
Su “Sanchidad” con tal de seguir en la poltrona
monclovita es capaz de todo. Para ello está dispuesto a aniquilar la cualidad,
la valía, el mérito, el esfuerzo, etc. Lo que interesa es un “pueblo soberano”
manso, sumiso y aborregado.
Y terminamos con unas frases de Abraham Lincoln y de
Manuel Azaña. Decía el primero: “Hay momentos en la vida de todo político en
que lo mejor que puede hacer es no despegar los labios”, y el segundo: “No
me importa que un político no sepa hablar, lo que me preocupa es que sepa lo
que habla”.
En fin, lo peor que le puede suceder a una sociedad es
que, por mor del “pueblo soberano”, los ignorantes, los indoctos, los
incompetentes y los idiotas se hagan con el poder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario