El folclore y el espectáculo titiritero, y también circense, con que se celebra la Navidad, y también la Semana Santa, están a la vista, amén del odio y persecución a la Iglesia Católica. Ahí está la imagen de la revista “Mongolia” en la que aparece el Niño Jesús como un excremento. Esta revista ha sido denunciada como pueden ver el vídeo de YouTube.
Ya decía el monstruoso Lenin, que para Pablo Iglesias
era un “genio”, que toda referencia a Dios era un autovómito despreciable, a la
vez que consideraba a la Iglesia como un estorbo para la expansión del
comunismo y lograr la destrucción del capitalismo, el “hombre nuevo” y el
“porvenir radiante de la Humanidad”.
El sentido religioso de los Reyes Magos prácticamente
ha desaparecido: carrozas con una parafernalia pagana y política de guiñoles y
música, sólo pensadas para el festejo y el regalo, como lo demuestran los
“personajes” Papá Noel y Santa Claus.
De la celebración de la auténtica Navidad, es decir,
la festividad solemne del nacimiento de Jesucristo, hijo de Dios, que se hizo
hombre para habitar entre nosotros, ha sido desvirtuada y transformada en una
distracción circense, que seguro envidiarían James Stewart, Cornel Wilde y las
guapas Betty Hutton y Gloria Grahame, en su extraordinaria película “El mayor
espectáculo del mundo”.
Pinchen en el siguiente enlace de YouTube:
Declaraciones
querella contra la revista Mongolia
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