miércoles, 29 de diciembre de 2021

La desintegración de la URSS ( V )


 

Marxismo: fanatismo y tiranía

El culto absurdo  que se rinde al marxismo (culto de dulía y de hiperdulía), unido a la superstición y fanatismo de esta “religión”, con su doctrina inmutable, obsoleta, añeja y trasnochada, que condena a todo lo que sea opuesto a sus principios y que, pedantemente también, condena como errores de la razón a todas aquellas verdades archirreconocidas y sobradamente demostradas por la realidad que vayan en contra de sus dogmas, pues eso, a pesar de todo esto, aún el marxismo tiene cierto predicamento en parte del mundo.

 La gente no piensa, o no quiere saber, cómo funciona el marxismo en la realidad. Vamos a esbozar un pequeño decálogo de tal funcionamiento.

 1º).- Tiene un verdadero horror a la libre discusión de ideas, al libre desarrollo de la literatura y del arte. Persigue de forma “gramsciana” el adoctrinamiento escolar y el monopolio de los medios de comunicación: prensa, radio, televisión, cuentos infantiles, libros de texto, etc. El ardor fanático de esta doctrina, mata el alma del individuo.

 2º).- La hipocresía es tal, que lo hace aparecer ante el mundo como bondadoso, caritativo, amable, tolerante, etc, cuando en realidad es precisamente todo lo contrario: es sembrador de discrepancias (aunque luego en el poder no las admita), es lanzador de combustible en la hoguera de las discordias humanas, provocador de guerras, instigador de odios. Todo esto lo hace para conseguir el triunfo de su “religión”, sin importarle el exterminio de personas y causar ruina de los pueblos. A pesar de esto, hablan de solidaridad y amor entre los pueblos ¡Qué horrible sarcasmo!.

 3º).- Los fámulos del marxismo se vuelven catatónicos contra todo los razonamientos que derrumban sus teorías, e intentan dar explicaciones “científicas” a todo el desbarajuste de sus ideas.

 4º).- Todo aquello que no esté conforme con sus razonamientos, no es verdad y lo tachan de irracional denominándolo “indignas supercherías y antojos de cerebros delirantes”.

 5º).- Con libros estultos y vulgares, pretenden cambiar y modificar hechos pasados históricos, pero no se dan cuenta que la verdad no se abate tan fácilmente.

 6º).- Declaman cosas de  memoria, hilvanando párrafos y más párrafos con una hábil selección de tópicos y lugares comunes, con argumentos de relumbrón, pero sin base empírica alguna.

 7º).- Con singular destreza formulan frases y expresiones tendenciosas y exageradas de las costumbres del mundo capitalista. El amontonamiento de tales frases y expresiones tienden a provocar en el lector la convicción absoluta de que el capitalismo domina injustamente todos los ámbitos de la sociedad y tiende, también, dicho amontonamiento, a excitar el odio. Sin embargo, cínicamente, y al son de la Internacional, no les queda más remedio que aplicar medidas y políticas liberales y capitalistas para sacar la economía a flote.

8º),- Cantan las excelencias marxistas, pero nada dicen del sometimiento colectivo ni de los terribles “experimentos sociales”.

 9º).- Fanáticamente, los marxistas siguen en sus trece: no quieren admitir que con democracia y libertad, toda la “ingeniería social” marxista-leninista no funciona, como ya está demostrado sobradamente.

 10º).- Estos coherentes marxistas, cuando van a Cuba, se hospedan en hoteles españoles o americanos. No les da por ir  a la casa de un humilde cubano y preguntarle cómo vive. Tampoco les da por decir a los pobres cubanos que el mundo no es precisamente el infierno en el que él vive desde hace cincuenta y ocho años.

Vean el siguiente vídeo de YouTube sobre el terror en la URSS. Pinchen en el siguiente enlace:

Apocalipsis Stalin. El demonio

Continuará.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog