Premisas falsas

Hay ideologías y sistemas que están basados en unas premisas totalmente falsas y sin embargo han tenido, y tienen, multitud de seguidores.


Entre estos seguidores se encuentran los “pensadores químicos” que todo lo explican y analizan con una pedante hermenéutica infumable. A pesar de que las premisas sean falsas, se dedican a hacer multitud de correcciones, ajustes, equilibrios y demás, para salvar la teoría.

Estas premisas falsas, que esconden multitud de falacias y errores no siempre visibles, para lo único que ha servido es para que las citadas ideologías y sistemas hayan quedado en el más absoluto ridículo, haciéndolas insostenibles e inservibles.

El asunto es tan claro, que incluso el más badulaque y cenutrio se da cuenta de que hay algo equivocado, aunque no sepa señalarlo, porque la razón, la evidencia y la lógica son superiores a los “razonamientos” de estos hermenéuticos personajillos que dicen de sí mismos “tengo mucho de científico”.

Pero es igual, oiga. El "pueblo soberano", ignorante y estulto, traga toda la demagogia y logomaquia que exhiben los de la internacional de la mentira, del odio y del terror.