Como observarán, añadimos un
nuevo apartado: el de los chistes, que insertaremos en último lugar.
“Reírse de
todo es propio de tontos, pero no reírse de nada lo es de estúpidos”. (Erasmo de Rotterdam).
“Todos
deseamos llegar a viejos, y todos negamos que hemos llegado” (Francisco de Quevedo y Villegas).
“Hay cosas
en la vida más importantes que el dinero ¡Pero cuestan tanto! (Groucho Marx).
“Lo que más irrita a los tiranos es la
imposibilidad de poner grilletes al pensamiento de sus subordinados”.
P. Valery.
“Libros y años hacen al hombre sabio”. Refrán popular.
“El amor o el odio hacen que el juez no
conozca la verdad”. Aristóteles.
“Un mentiroso siempre es pródigo en juramentos”.
Corneille.
“El que seduce a un juez con el prestigio
de su elocuencia, es más culpable que el que le corrompe con dinero”.
Cicerón.
“Casa sin moradores, nido de ratones”. Refrán popular.
“Comer y gruñir, engordar para morir”. Refrán popular.
“El huésped y la pesca, a los tres días apestan”.
Refrán popular.
“Si no es correcto, o lo hagas. Si no es
verdad, o lo digas”. Marco Aurelio.
“El cinco por ciento de la gente piensa; el
diez por ciento de la gente piensa que piensa; y el otro el ochenta y cinco por
ciento prefería morir antes que pensar”. Thomas A. Edison.
“Malum consilium quod mutari non potest”.
Frase latina que se puede traducir por “Malo es el plan que no se puede cambiar”.
Fábula de Esopo. La mujer y la gallina.
“Tenía una mujer una gallina que le ponía un
huevo cada día, y creyendo que si la alimentaba más pondría dos huevos en lugar
de uno, comenzó a darle de comer con toda abundancia. A medida quela gallina
fue engordando, fue también dejando de poner, y al fin no ponía tan siquiera ni
un solo huevo.
La demasiada abundancia también es perjudicial, y a veces
entorpece a muchos”. ( I )
Chiste. Elocuente
respuesta.
El marido:- El jefe
estaba como un corderito.
.- ¿Sí, qué te dijo?
.- Baaa! . . .
( I I )
( I ).- “Esopo. Fábulas escogidas”, Editado por Edicomunicación, S.A., 1994, página 27
( I I ).- “Nuevos
Chistes Chip y Chop”, Ediciones Rodegar, Barcelona 1962, página 12.
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