lunes, 19 de agosto de 2019

Personajes de la Segunda República. Dolores Ibárruri, “La Pasionaria” ( I I )



Y continuamos con La Pasionaria, otro de los nefastos personajes de aquella República.

Como ya saben, a partir del 18 de julio la consigna y grito preponderante en la franja republicana, era el “!No pasarán!”, atribuido a la Pasionaria. Otra mentira, ya que tal consigna fue introducida en España por el orondo Indalecio Prieto varios años antes.

En su obra “El único camino”, la Pasionaria trata de “alimañas cobardes” a todas aquellas personas verdaderamente republicanas que se oponían a las órdenes del comunismo staliniano.

Cuando cayó Cataluña en manos de las tropas nacionales, hubo una conferencia en Madrid de los comunistas que, presidida por la Pasionaria, se reclamaba la necesidad de resistir. Había que respetar las órdenes de Stalin.

Como recordarán, Cipriano Mera fue un anarquista sindicalista que participó activamente en las batallas de Madrid y Guadalajara. Era el jefe de la Columna Mera, y después de la 14ª División, y por último del IV Cuerpo del Ejército. Pues bien, este señor advirtió a filosovietista Juan Negrín que “el Partido Comunista está tratando de apoderarse de todos los mandos de nuestro ejército”. En aquellos mismísimos momentos, el PC celebraba una reunión de sus gerifaltes, bajo la dirección la Pasionaria, Checa y Uribe. Poco después de dicha reunión “Mundo Obrero” publicó un comunicado en el que se reconocían los propósitos de golpe de estado.

A tal efecto, el 24 de febrero de 1939 Juan Negrín, a la sazón jefe del gobierno, recibe a los mandamás del PC: la Pasionaria, Delicado, Checa y alguno más, comunicándole la decisión de seguir resistiendo hasta el final, diciéndole también que estaban dispuestos a tomar el poder, es decir, dar un golpe de estado.
Como ya saben, Negrín y sus efes comunistas terminaron huyendo. Los primeros en huir fueron la Pasionaria, el general Cordón y varios comunistas más, entre ellos Rafael Alberti ( I ) y el consejero soviético Stepanov que, junto a Togliatti, eran los que movían los hilos en España de la Komintern stalinista. El coronel Casado califica la fuga de los líderes comunistas de vergonzosa.
En el último número de “Mundo Obrero”, se lee el siguiente cínico y mentiroso comentario:

“No es cierto que hayan huido el jefe del Gobierno, doctor Negrín, ni el ministro de Estado Álvarez del Vayo. No es cierto que hayan huido nuestros camaradas Pasionaria y Uribe. Como tampoco Líster y Modesto. Todos permanecen en sus puestos”.

( I ).- ¿Se acuerdan de la poesía de este intransigente y cruel ciudadano “a galopar, a galopar, hasta enterrarlos en el mar?”

Continuará.



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