En esta democracia a la española, parece normal que se lancen todo tipo de venablos contra todo lo que no sea "políticamente correcto" Así se hizo durante el “gonzalato” y el "zapaterato". En estos momentos, hay gente por ahí dando "coletazos" sembrando odio y animadversión por doquier intentando, sobre todo, desguazar España.
Este proyecto desguazador, como recordarán, empezó cuando ZP, sujeto inepto e inútil, estaba encaramado en la Moncloa. Sus errores fueron muchos, pero el mayor creemos que fue el de creer que una nación se puede dividir así como así, sin que ocurra nada grave. Ahí están los llevados y traídos estatutos catalán, gallego, vasco y andaluz, que no están trayendo más que divisiones y enfrentamientos.
La Constitución actual, que podríamos llamar autonomista y descentralizadora, procede de de una experiencia liberal-intelectual que se remonta, nada más y nada menos, a Castelar, eminente filósofo y orador y presidente de la Primera República española.
En los albores de nuestra democracia, el autonomismo descentralizador fue aceptado y defendido por Adolfo Suárez y su ministro Clavero Arévalo. Digamos que los gobiernos posteriores respetaron más o menos este modelo de Suárez, hasta que llegó Zapatero que cambió el asunto por un modelo federal de soberanía compartida. La cuadratura del círculo, vamos.
Además, esta frívola descentralización, llevó a una excesiva protección en lo que a minorías culturales y lingüísticas se refiere, en detrimento de todo lo que nos es común a todos los españoles.
La verdad es que no vemos salida para desmontar todo este tinglado "zapateril". Salida la hay, pero con este gobierno que tenemos actualmente es impensable. Sus complejos y otras cosas son muy grandes.
¡Y pensar que este sujeto ZP aún anda por ahí dando "consejos" y "conferencias"!
¡Y pensar que este sujeto ZP aún anda por ahí dando "consejos" y "conferencias"!
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