La verdad es que es de repulsión que los de la
internacional de la mentira, del odio y del terror no usen para nada la palabra
España, no digamos ya nada de decir Nación o Patria. Con decir país, y como
mucho Estado, la cosa ya está resuelta. El asunto llega a tal extremo que hasta
en la información meteorológica se usan estos conceptos, incluso el de
península, oiga.
Todo esto está cocinado por esos “internacionalistas,
pues ya se sabe que una de sus obsesiones es la negación de España, a pesar de
tener una gran Historia en varios terrenos, como pueden ser, por nombrar un par
de ellos, en el de las conquistas y descubrimientos, y en el literario. Y
cuando hablamos de conquistas también nos estamos refiriendo a las que se
rechazaron, como la romana y la islámica.
Pero esto no importa, oiga. Ahí están los fabulosos
cuentos de hadas relatados con un éxtasis y un arrebato propios de la mitología
griega. La verdadera Historia de España, de nuestra Nación, de nuestra Patria,
le importa un bledo, dos cominos y tres dídimos a esta progresía de gran vivir,
se sillón y de suntuosos chalets y viviendas.
En fin, la “memoria histórica zapateril” y la “memoria
democrática” del “sanchismo”, son los espejos en los que se miran ciertos
“historieteros” para contarnos la “pravda”. Ya nos entienden.
¡Ah!, y si dices que eres español y patriota, serás un
“facista”, como decía un votante socialista. También decía este docto sujeto en
su día que quería una “amistía”.
¡Ah!, sin embargo el sátrapa Fidel Castro hablaba de “patria
o muerte”, y un pedante marxista infumable decía que “a patriota no me
gana nadie”, diciendo sin embargo que “los rojos somos
internacionalistas”. Sin comentarios.
Nota.- Próximamente comentaremos el libro “La gesta
española”, autor José Javier Esparza, Ediciones αltera, 2007, 325 páginas.
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