Un sujeto que vivió opíparamente durante el régimen de
Franco, cuando falleció éste dijo que “el ordeno y mando se acabó”.
Después, cuando llegaron los sociatas, el negocio que tenía se derrumbó y
lloraba por el “ordeno y mando”.
Dicho esto, en estos momentos sí que estamos “bajo el
ordeno y mando”. Su Sanchidad sabe que si pierde las próximas elecciones de
2.027, aunque se pueden celebrar otras antes, él y su “complexo” pasarán de la
poltrona al banquillo. Para evitar esto, con la pericia de la que hace gala
constantemente, ya está en proceso electoral para no perder la poltrona, siendo
el “puto amo” de todos los organismos y entidades que puedan intervenir
en tales elecciones, como puede verse en INDRA Sistemas S.A., CNI (Centro Nacional
de Inteligencia, Telefónica, TVE, etc.
Como es lógico, este sujeto quiere abatir y demoler
varios estorbos, trabas, obstáculos, etc, siendo el primer intento de
demolición el de Isabel Díaz Ayuso, una chica valiente e inteligente, que le
“gusta mucho la fruta”.
Su Sanchidad no soporta que le abucheen y le insulten
en la calle, mientras ella recibe vítores y aplausos por doquier. Para que
desaparezca esto, el doctor Sancheznstein ha extendido y expandido todo lo
habido y por haber contra Isabelita, valiéndose de todo tipo de argucias. Como
no podía ser de otra manera ella, ante este comportamiento “sanchista” comenzó
su ataque poniendo en un aprieto y en un apuro a Su Sanchidad, por mor de sus
traspiés y yerros tanto a nivel nacional como internacional.
Obviamente, Isabelita no lo tiene nada viable y fácil,
ya que vencer y ganar a todo el entramado estatal, amén de las artimañas y
jugarretas de Su Sanchidad, es una labor titánica que precisa valentía, coraje,
firmeza, empeño, tesón, perspicacia, sutileza, etc, aunque Ayuso de todo esto y
demás cosas nada carece.
En fin, el “ordeno y mando” contra Isabel Díaz Ayuso
ahí está.
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