¿Dónde están?

Como ya saben, Afganistán está otra vez, después de veinte años, bajo el terror y horror de los talibanes acurrucados en su barbarie y ferocidad, ya que lo mismo les da destrozar y despedazar todo lo que encuentren a su paso, que apedrear y lapidara mujeres, o matar a niños, o decapitar a gente, o ahorcar homosexuales, etc, etc. Visto lo anterior, ¿dónde están esos “artiscejos”, artiscejas” y “artiscejes”, que en su día protestaban y se manifestaban por cosas sin importancia? Entre las características de este “complexo” está su odio a la religión cristiana, ya que se consideran ateos. Pero de la religión musulmana no dicen ni pío . . . pero como estamos en tiempos de tolerancia, hay que permitirlo todo, oiga, aunque bueno, si a Isabel Díaz Ayuso o a Santiago Abascal se les ocurriese apedrear o lapidar mujeres, o ahorcar a lesbianas y homosexuales, el asunto cambiaría.

La citada tolerancia es una palabra muy usada a la que se recurre cuando interesa. Se la considera como un bien total y absoluto que hay que defender, amparar y proteger con uñas y dientes. Pero, claro, esto sólo se hace cuando lo que haya que tolerar sea “políticamente correcto” o “intensamente contemporáneo”, y que además cuente con la aquiescencia, beneplácito, anuencia y venia de los profilácticos e higiénicos “pensadores químicos”, y de los semáforos de la palabra culta y “buenas costumbres”.

Esta “élite” de tolerantes, suele estar empapada de ideas dogmáticas y de credos irrefutables, amén de doctrinas y disciplinas autoritarias, déspotas y tiranas, por mucho que trate de encubrir y ocultar. Lo que se busca en el fondo es derrumbar, derribar y hundir todos los valores éticos, morales y decentes.

Después viene otro asunto. Dicha “élite” cuenta con algunos “mass-media” de lo más inepto, que están controlados y vigilados por una serie de sujetos, “sujetas” y “sujetes” que, entre otras cosas, embrollan, enredan y lían, además de confundir la ilegalidad, la iniquidad, el abuso, etc, con la potestad y el poder, encargándose de esparcir y desparramar, desafíos, retos, descontentos, insatisfacciones, omisiones, mentiras, rencores, animadversiones, odios, etc, perdiendo el tiempo en asuntos, temas, debates y discusiones interminables que nada tienen que ver con la realidad social.

En fin, como ya saben, los talibanes están a un paso de Kabul. Cuando entren se armará una muy gorda ¿Dónde están estos “artiscejos”, “artiscejas” y “artiscejes”, amén de los LGTB, que no dicen ni mu sobre este asunto?