martes, 29 de diciembre de 2020

La memoria histórica. La Generalidad de Cataluña y la República ( X X X ).


 

Hay que “recuperar la memoria histórica”, oiga. Vamos a ello.

 Como ya saben, Luis Companys i Jover fue presidente de la Generalidad catalana desde 1934 hasta terminar la Guerra Civil. Como otros muchos, al acabar la contienda huyó a Francia. Vamos a ver lo que nos cuenta Manuel Azaña, que ocupó los puestos Jefe de Gobierno y Presidente de la República, en sus “Diarios” sobre el mentado Companys y la Generalidad y también sobre la República. Dichos “Diarios” fueron unas anotaciones íntimas y privadas escritas desde 1911 a 1939, en donde aparecen informaciones sobre la política española de aquellos años, que van desde el reinado de Alfonso X I I I, pasando por el gobierno de Primo de Rivera, hasta la Segunda República y la Guerra Civil. Nos dice Azaña:

 “La muchas y muy enormes y escandalosas pruebas de insolidaridad y despego, de hostilidad, de ‘chantajismo’ que la política catalana ha dado frente al gobierno de la República”.

 “Asaltaron la frontera, las aduanas, el Banco de España. Montjuic, los cuarteles, el parque, la Telefónica, la Campsa, el puerto, las minas de potasa, crearon la consejería de Defensa, se pusieron a dirigir su guerra que fue un modo de impedirla, quisieron conquistar Aragón, decretaron la insensata expedición a Baleares para construir la gran Cataluña del Prat de la Riba”.

 “La Generalidad ha vivido en franca rebelión e insubordinación y si no ha tomado las armas para hacer la guerra al Estado será o por qué no las tiene o por falta de decisión o por ambas cosas, pero no por falta de ganas”.

 “Lo mejor de los políticos catalanes es no tratarlos”

 “Y se esas gentes van a descuartizar España prefiero a Franco. Con Franco ya nos entenderíamos nosotros, o nuestros hijos, o quien fuere, pero estos hombres son inaguantables”.

 “Es una ley de la historia de España la necesidad de bombardear Barcelona cada cincuenta años”.

 Por otra parte, Azaña tenía la siguiente opinión sobre la política republicana de la gente de izquierdas. Decía que era una “política tabernaria, incompetente, de amigachos, de codicia y botín, sin ninguna idea alta”, diciendo también en sus “Diarios” que los políticos que le rodeaban eran “obtusos, loquinarios, botarates, gente impresionable, ligera, sentimental y de poca chaveta”, diciendo asimismo que eran inaguantables por su “inepcia, injusticia, mezquindad o tontería”, a la vez que comentaba que “no saben qué decir, no saben argumentar. No se ha visto más notable encarnación de la necedad”, añadiendo “me entristezco, casi hasta las lágrimas, por mi país, por el corto entendimiento de sus directores y por la corrupción de los caracteres”, hablando también de “zafiedad, poliquitería, ruines intenciones, gentes que conciben el presente y el porvenir de España según se los dicta el interés personal”.

 Cuando se llevaba un año de guerra, dijo que “ninguna política se puede fundar en la decisión de exterminar al adversario”

 En fin, tal parece que en estos momentos estamos en aquellos tiempos republicanos que nos comenta Manuel Azaña.

 Continuará.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog