martes, 4 de agosto de 2020

El Plan Marshall, Cuba y la Fe



Como siempre decimos, hay que “recuperar la memoria histórica”, pero la reciente. Vamos al asunto.




El Plan Marshall, como ya se sabe, fue aprobado a mediados de Junio de 1947 por George Marshall, secretario de Estado norteamericano por aquellos días, con el objeto de ayudar a la reconstrucción europea después de la II Guerra Mundial. Dicho plan, que duró cuatro años, sirvió para que Alemania, entre otras naciones, saliera del pozo económico en el que estaba sumido.

Al terminar la guerra, los alemanes carecían de todo. No tuvieron más remedio que recurrir al trueque: ropa, muebles, enseres, etc, por alimentos. El Plan Marshall, 13 mil millones de dólares de aquel entonces, fue concedido además de a Alemania, a otras quince naciones. Pero fueron los germanos quienes más provecho sacaron. Debido a esta ayuda y a las políticas liberalizadoras del padre del milagro alemán, Ludwig Erhard, la industria creció en un 300 % durante el período 1947-1951.


También Cuba tuvo su “Plan Marshall” al recibir de la Unión Soviética más dinero de lo que se había aportado a Europa, teniendo en cuenta que este plan soviético duró 30 años. Se puede decir que, durante este período, Cuba vivió gracias al presupuesto de la URSS. Entre 1961 y 1984 los créditos y subsidios suministrados a Cuba se aproximaron a los 38 mil millones de dólares, recibiendo además 5.000 millones anuales en los últimos años de la década de los ochenta.


Aparte de todo esto, mientras el gobierno cubano tenía destacadas tropas en África, recibía también de los soviéticos una ayuda de tres millones de dólares diarios que, multiplicados por los catorce o quince años que estuvieron por allá, suman una cantidad astronómica.


Las preguntas parecen obvias: ¿en dónde se metió tanto dinero?, ¿por qué Cuba no despegó como Alemania? ¿No quedamos en que el perverso capitalismo genera miseria, explotación, etc y que el comunismo es todo bondad, justicia, equidad?


Después de la retirada de la ayuda soviética, llegó el período especial, así llamado por la propaganda del régimen castrista. En realidad el "período especial" era el anterior ¿Acaso no es especial que un régimen viva subsidiado por otro durante tantísimo tiempo?

Según como se mire, puede que la camarilla castrista tuviese razón: durante esos 30 años largos para el sufrido pueblo cubano, solamente unos pocos nomenklaturistas (unos 600.000) disfrutaron y gozaron, y disfrutan y gozan, de todas las maravillas de Cuba. Eso sí que es “especial”.


Pero, claro, el pueblo tiene dignidad. La dignidad tiene forma de langosta que se comen calladamente los jerarcas del partido, mientras el pueblo se muere de hambre con su libreta de abastecimiento: 3 kg de arroz, 6 kg de azúcar, ½ kg de pollo, 4 huevos, algunos gramos de chícharo. Todo esto por persona/mes. También ahora comen gato hervido. Las personas con dignidad no comen esto porque fueron fusiladas o están encarceladas.


¿Qué ha traído a Cuba el "período especial", entendiendo por tal el de la propaganda castrista? Pues nada bueno para el pueblo: jineteras, alcoholismo, mendigos, desempleo a gran escala, miseria, hambre, etc, etc


Sin embargo, las 200.000 personas empleadas en el MININT (policías y funcionarios), no tiene ningún problema. Sus sueldos superan al de los maestros.


Otro tanto ocurre con las Fuerzas Armadas que son desproporcionadísimas para una población de 11 millones de habitantes: miles y miles de oficiales y más de cien generales, cuyos sueldos son superiores al de los médicos.


¿Cómo es posible que con toda esta gigantesca entrega de dinero por parte de la URSS se haya llegado a tales niveles de droga, prostitución, delincuencia, etc? ¿Cómo se entiende que los niños carezcan de la leche suficiente a partir de los siete años? ¿Cómo explicar a los del “modelo referencial” que la población esté deseando salir del país? ¿Cómo comprender que haya bohíos, viviendas y edificios que se derrumban sin más ni más? ¿Cómo se comprende que haya 200.000 perros callejeros muertos de hambre deambulando por Santiago de Cuba, Santa Clara, Camagüey y La Habana, según comentó el Departamento de Higiene y Epidemiología del Ministerio de salud Pública en el diario Juventud Rebelde del día 8 de Febrero de 2.004? 


El artículo 1º. de la Constitución cubana dice: Cuba es un Estado socialista de trabajadores, independiente y soberano, organizado con todos y para el bien de todos, como república unitaria y democrática, para el disfrute de la libertad política, la justicia social, el bienestar individual y colectivo y la solidaridad humana. 

Visto esto, ¿dónde están el bienestar individual y colectivo?

A pesar de toda esta penuria, el bondadoso, noble y sufrido pueblo cubano aún tiene humor para hacer chistes y chascarrillos sobre su situación. Dicen que en las tumbas y en los cementerios, ya no se pone RIP, sino la inscripción NR (No Resistió). También comentan que no comprenden el problema de las vacas locas, cuando ellos están locos por comer una vaca. Dicen también que los cubanos que resisten es porque tienen FE, es decir, Familia en el Extranjero.


A pesar de todo esto y más, todavía hay gente que dice que Cuba es un paraíso. Tienen razón porque sí es un paraíso: el de la miseria.


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