Muchos lectores de este blog,
nos han preguntado que por qué no permitimos el comentario sobre nuestros
artículos. La respuesta, como ya hemos dicho en otras ocasiones, es el insulto:
fascista, trasnochado, retrógrado y demás calificativos de catálogo y de panel.
A estos individuos habrá que
decirles que nuestra actitud no es el resultado de una teoría o de una
ideología, sino que es producto de una gran antipatía, por no decir otra cosa,
por todo tipo de odio y de crueldad, que algunos siguen esgrimiendo en nuestros
días.
Seamos sinceros: la
persecución de utopías “grandiosas” ha causado millones de muertos, y generado
miseria a raudales. Vean la miseria en Cuba, en Corea del Norte o los 145 millones
de pobres que dejó el sistema soviético.
Además, se da la
circunstancia de que estas personas que nos atacan son partidarias de sistemas
de gobierno, en los que la gente no tiene ni derechos políticos, ni desarrollo
intelectual libre, teniendo que obedecer sin rechistar, además de oír, ver y
callar.
Pero es igual, oiga, seguirán
con su empecinamiento.
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