Como ya saben, la EPA (Encuesta de Población Activa),
es un estudio estadístico que se hace con el objeto de adquirir datos para
saber, entre otras cosas, cómo anda el asunto del trabajo y que se utiliza para
calcular y deducir la tasa de paro.
Anteayer, día 28, el INE (Instituto Nacional de
Empleo) publicó la EPA del primer trimestre de este año. Los datos son de
auténtico desastre en el terreno laboral, por mor de las medidas económicas,
sociales y sanitarias tomadas por este desgobierno ante la pandemia.
Más de medio millón de trabajadores están bajo los
efectos de ERTES, afectando el paro a más de 120.000 personas ¡Medudo
trimestre! Pero, claro, oiga, la “nomenklatura” del régimen nos dirá que las
personas de un ERTE no son parados, pero sin embargo no trabajan. Gran
estupidez. Por otra parte, de momento, tampoco cobran. A lo mejor quizá cobren
dentro de un par de meses. En una palabra: además de estar confinados en sus
domicilios, ni trabajan, ni cobran. Pero no son parados, oiga.
Luego nos hablan del ingreso mínimo vital, que es un
tema un tanto complicado, diciéndonos también que “Nadie se va a quedar
atrás”. Vamos a ver: si lo de los ERTES no funcionan correctamente, como
tampoco funcionan las tramitaciones de cotizaciones e impuestos, “¿nadie se
va a quedar atrás?” Que se lo pregunten a las PYMES y a los autónomos.
Pero, claro, oiga, a lo mejor todo esto se resuelve. A
ver qué nos dice sobre estos asuntos la señora Nadia María Calviño Santamaría,
vicepresidenta tercera del gobierno, ministra de Asuntos Económicos y
Transformación Digital de España ¡Casi “na”!
No hay comentarios:
Publicar un comentario