Ante las próximas votaciones. Vota, paga y calla.
Ya se palpa de nuevo el ambiente electoral y vuelven otra vez a
aparecer los términos “izquierda” y “derecha”, no como opciones políticas en
las que los candidatos toleren y respeten sus lógicas discrepancias, sino como
vocablos que expresan antagonismo, descalificación, insulto (“derecha asilvestrada”, Javier
Fernández, ex presidente asturiano “dixit” en su día) e incluso violencia entre
los adversarios electorales. Algunos partidos no se dan cuenta que el apelar a
tales conceptos para capturar votos, no tiene sentido. Al fin de cuentas, el
que un partido gane unas votaciones, no es porque lo hayan votado sus
militantes o sus simpatizantes, sino porque, a última hora, el voto “infiel”,
el voto “variable”, es decir, el voto de las personas sin adscripción ideológica,
es el que desequilibra la balanza. Esto es debido a que la gente, en general,
se preocupa más por los problemas (paro, inseguridad, terrorismo, marginación,
incultura, etc) que por las ideologías. Éstas, muchas veces, dificultan las votaciones
y la convivencia, transmitiendo subliminalmente “vota y calla”, o mejor dicho, “vota,
paga y calla”.
Esperemos que en estas próximas votaciones los
partidos se respeten mutuamente y que no ocurra como en otros sitios, en donde
algunos candidatos se les consideran poco menos que héroes.
Y que todo aquel partido que no respete la convivencia
democrática, sea castigado enérgicamente en las urnas. Pero, claro, esto es
como pedir peras, no al olmo, sino a la secuoya o a la mismísima velintonia.
Y terminamos con un par noticias que se han difundido
poco o nada: un 25 % de españoles no sabe que la Tierra gira alrededor del Sol
y un 30 % cree que humanos y dinosaurios convivieron juntos. Lo curioso del
caso es que esta gente vota. Sin comentarios.
¡Ah!, y para terminar, y como ya sabrán, los
“podemitas” dicen que afrontan esta campaña electoral “con el objetivo de evitar que resucite el bipartidismo”. Claro, lo
que esta gente quiere es el monopartidismo al más puro estilo de las dictaduras
marxistas-leninistas.
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