domingo, 6 de septiembre de 2020

El PP, ¿es de derechas o de izquierdas?



Ya hemos escrito varias veces en este blog, que el PP era un partido híbrido, acomplejado y desnortado. Y decimos esto porque, como ya saben, en unos sitios dicen una cosa y en otros la contraria, según convenga.

Si algo tiene de derechas, se podía decir que es de la “derecha vergonzante”, es decir, que sus miembros tienen miedo a decir que efectivamente son de derechas. No hay nada más que ver los sujetos que de este partido pululan por Asturias y por España.

En esta España nuestra, que diría la cantante Cecilia, cuando gana la izquierda, gobierna como tal. Y ya sabemos las consecuencias. Sin embargo, cuando gana el PP, parece que sigue el mismo camino que la izquierda, con lo cual la gente queda un poco con la boca abierta, ya que no se sabe muy bien qué modelo social defiende.

Que expliquen claramente qué es lo que entiende por familia natural; qué opina sobre el derecho a la vida, ya que lo primero que tenía que hacer sobre este asunto era derogar la ley del aborto; qué opina, asimismo, sobre nuestra tradición cultural y cristiana, y qué topina también sobre lo que pudiéramos llamar soberanía nacional, no vaya a ser cosa también que digan que “es discutible”, como en su día dijo el Bobo Solemne. Porque, a lo mejor, piensan estos varones sesudos del PP, que todo esto son cosas caducas, arcaicas y de otros tiempos. Aclárense.

A este híbrido partido no le importa absolutamente nada que los “mass-media” sigan dominados y controlados por las huestes “progresistas”. La resignación sobre este asunto es indignante. Y prueba de ello es que se niega a participar en dichos “mass-media” en todo tipo de debates, ya sean culturales, éticos, morales e incluso ideológicos, aunque nos gustaría saber cuál es la ideología de estos sujetos “peperos”. Sospechamos que ninguna, pues sus discursos están preñados de “tecnocracia”, de “obtener buenos resultados”, o de “gestionar eficazmente”, etc. Pero la apatía y la palabrería siguen campando por sus respetos, además de no abrir los ojos ante la realidad, ni tampoco escuchar y entender.

Por otra parte, cuando llega el momento de definirse, saltan los complejos: “El asunto no es una cuestión de derechas o de izquierdas, sino de sentido común”. También Pablo Iglesias decía en su día que La clave no es un eje izquierda-derecha, sino democracia-dictadura" ¿Irán por ahí los tiros?



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog