Sí, ¿qué ha sido de aquellas personas y “personos” que componían el tristemente célebre gobierno de ZP? ¿Dónde se halla ahora, después de la desaparición política de su mentor, aquel grupo formado en su mayoría por incultos e incultas, por gente sectaria osada y atrevida, de escasa o nula capacidad para la política, que tomaban decisiones que les “salían de los cojones” (Leire Pajín dixit)? Veamos someramente un pequeño historial de las principales cabezas pensantes de aquel nefasto régimen "zapateril". Y empezamos por la heteróloga y frenópata Leire Pajín.
Esta “sujeta”, junto con otras, fue una de las joyas de la corona de aquel régimen. Según una declaraciones suyas, en su carrera política iba va a hacer “un paréntesis” para incorporarse a la Organización Panamericana de la Salud, yéndose a vivir a los EE.UU. Nos extraña su nueva domiciliación en un país capitalista al que odian ella y sus correligionarios ¿Por qué no se ha ido a vivir a Cuba, “modelo referencial”, dirigido por la “personalidad histórica” de Fidel Castro?
Otro ejemplar del régimen zapaterista fue también la “sujeta” Bibiana Aído, persona totalmente inexperta en asuntos políticos. Su curriculim vitae era arrollador, oiga: de ser agente del flamenco andaluz, saltó a un ministerio, el de Igualdad, demostrando aquí su ineptitud. Conviene recordar que este ministerio, por mor de aquellas reconversiones que hacía el Bobo Solemne, se convirtió en Secretaría de Estado. Pero, claro, como la situación del partido en aquellos tiempos empezaba a tambalearse, fue “destinada” a la ONU como “asesora” dentro del organismo de la mujer ¡Casi “ná”!
Otro ejemplar del régimen zapaterista fue también la “sujeta” Bibiana Aído, persona totalmente inexperta en asuntos políticos. Su curriculim vitae era arrollador, oiga: de ser agente del flamenco andaluz, saltó a un ministerio, el de Igualdad, demostrando aquí su ineptitud. Conviene recordar que este ministerio, por mor de aquellas reconversiones que hacía el Bobo Solemne, se convirtió en Secretaría de Estado. Pero, claro, como la situación del partido en aquellos tiempos empezaba a tambalearse, fue “destinada” a la ONU como “asesora” dentro del organismo de la mujer ¡Casi “ná”!
Conviene recordar también sobre este asunto que Zapatero, con sus geniales decisiones, se comprometió con el citado organismo para donar 100 millones de €. Despilfarro y derroche por doquier.
Otra ínclita e inefable mujer del mentado régimen zapateril, fue Carmen Chacón, ministra de Defensa y “niña de Felipe González”. Sobre esta “tipa” no merece la pena perder el tiempo hablando de ella.
Otro elemento destacado fue Pepiño Blanco, orgullo y prez del sistema. Ignorante, inútil y orgulloso, siempre vivió a la sombra de “El Maquiavelo de León”, llegando a ser ministro de Fomento, a la vez que Vicesecretario General del PPSSOOEE, cargo éste que había desaparecido y que en su día fue ocupado por Alfonso Guerra. Como también se vio salpicado por escándalos y corrupciones (vean las diapositivas y pongan los altavoces), dijo que se retiraba “de la primera línea de la política”. Sin comentarios.
El caso de la “sujeta” Magdalena Álvarez, Maleni para los amigos”, fue paradigmático. Su elocuencia y léxico eran dignos de hacerla “miembra” de la RAE. Su filosófica frase “cuido tanto hablar, que hablo peor. Porque pienso más rápido que estoy hablando”, haría meditar mucho al “Kalicatres sapientísimo” de La Codorniz. También conviene recordar otras palabras que denotaban la catadura moral de esta impresentable ¿Se acuerdan cuando dijo aquello de que quería ver a Esperanza Aguirre “tumbada en las vías del tren o colgada de una catenaria?”
Posteriormente, y con el apoyo del gobierno, fue nombrada vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones, cargo este más apto y más a tono con sus cualidades, oiga.
En fin, esto es sólo una muestra de aquel equipo desastroso que tenía a sus órdenes el Bobo Solemne. No nombramos a Miguel Ángel Moratinos, a Trinidad Jiménez, a Fernández Bermejo y demás “complexo”, porque no merece la pena perder tanto tiempo.
Otra ínclita e inefable mujer del mentado régimen zapateril, fue Carmen Chacón, ministra de Defensa y “niña de Felipe González”. Sobre esta “tipa” no merece la pena perder el tiempo hablando de ella.
Otro elemento destacado fue Pepiño Blanco, orgullo y prez del sistema. Ignorante, inútil y orgulloso, siempre vivió a la sombra de “El Maquiavelo de León”, llegando a ser ministro de Fomento, a la vez que Vicesecretario General del PPSSOOEE, cargo éste que había desaparecido y que en su día fue ocupado por Alfonso Guerra. Como también se vio salpicado por escándalos y corrupciones (vean las diapositivas y pongan los altavoces), dijo que se retiraba “de la primera línea de la política”. Sin comentarios.
El caso de la “sujeta” Magdalena Álvarez, Maleni para los amigos”, fue paradigmático. Su elocuencia y léxico eran dignos de hacerla “miembra” de la RAE. Su filosófica frase “cuido tanto hablar, que hablo peor. Porque pienso más rápido que estoy hablando”, haría meditar mucho al “Kalicatres sapientísimo” de La Codorniz. También conviene recordar otras palabras que denotaban la catadura moral de esta impresentable ¿Se acuerdan cuando dijo aquello de que quería ver a Esperanza Aguirre “tumbada en las vías del tren o colgada de una catenaria?”
Posteriormente, y con el apoyo del gobierno, fue nombrada vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones, cargo este más apto y más a tono con sus cualidades, oiga.
En fin, esto es sólo una muestra de aquel equipo desastroso que tenía a sus órdenes el Bobo Solemne. No nombramos a Miguel Ángel Moratinos, a Trinidad Jiménez, a Fernández Bermejo y demás “complexo”, porque no merece la pena perder tanto tiempo.
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