sábado, 30 de mayo de 2020

Memoria histórica: asesinatos cometidos por los comunistas




Como ya sabrán, en su día “Podemos” hermanó a los mártires de Paracuellos del Jarama, entre los que se encontraban muchos jóvenes entre 17 y 21 años, es decir, menores de edad, como pueden ver en la esquela del diario El Mundo, de fecha 4 de diciembre de 2006, pues eso, los hermanó con el “fascismo”. Esto llevó a la sujeta Carmena, cuando era alcaldesa de Madrid, a intentar quitar el nombre de la calle madrileña “Mártires de Paracuellos”, cosa que no consiguió. Sin embargo, de los asesinatos cometidos por los de su bando, no dicen ni pío. Veamos algunos. Hay que “recuperar la memoria histórica”, oiga.

Salvador Alarcón Horcas. Este señor fue magistrado del Tribunal Supremo, siendo fiel al gobierno de la República cuando ocurrió el Levantamiento de 1936. El diario “Claridad”, de ideología de extrema izquierda de la rama de Largo Caballero, prácticamente comunista, le acusó de participar en el juicio contra los promotores de la revolución de 1934. El 13 de agosto de 1936 fue detenido por milicianos rojos, siendo asesinado en la Casa de Campo madrileña.

Camillo Bernieri fue un escritor italiano que vino a España a luchar en el bando republicano, siendo militante socialista y posteriormente anarquista. En mayo de 1937, y durante los enfrentamientos en Barcelona de anarquistas y trotskistas contra socialistas y comunistas, fue asesinado por milicianos socialistas y comunistas.

Zacarías García Villada, fue un sacerdote asesinado por los rojo-republicanos en octubre de 1936, en Vicálvaro.

José María Hinojosa Lasarte, amigo de García Lorca, fue asesinado por los rojos en Málaga en agosto de 1936, junto a su padre y un hermano.

Álvaro López Núñez, periodista y escritor, fue asesinado, junto a su hija Esther, por los mismos canallas rojos en el cementerio madrileño de La Almudena.

Ramiro de Maetzu, escritor de la Generación del 98, fue asesinado por los comunistas en el cementerio madrileño de Aravaca.

Pedro Muñoz Seca, escritor preferentemente de obras de teatro, fue también asesinado por los comunistas en noviembre de 1936 en la masacre de Para cuellos del Jarama.

En fin, podríamos seguir y seguir. La relación sería larguísima. Lo único que nos queda por decir al tándem Sánchez-Iglesias, y su “complexo”, es que hay que sustituir la propaganda por la verdad, ya que se están contando y aumentando mentiras y más mentiras.

Nota.- Recomendamos leer los comentarios sobre los libros “Paracuellos del Jarama ¿Carrillo culpable” ( I ) y ( I I ), y “Paracuellos-Katyn”, insertados en este blog con fechas 7 y 8 de noviembre de 2016.



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