No, no piensen que es un apodo o un mote. Es la nueva
ley de educación: Ley Orgánica de la Modificación de la Ley Orgánica de
Educación, es decir, la LOMLOE que, curiosamente, y como ya sabrán, es la séptima
ley de educación ( LOECE, LODE, LOGSE, LOCE, LOE, LOMCE) en cuarenta ¡Casi
“ná”!. También se la conoce como la ley Celaá, en “honor” de María Isabel Celaá
Diéguez, ministra de Educación y Formación Profesional.
Aprovechándose de esta desastrosa situación pandémica en
la que nos encontramos, con más de 27.000 personas fallecidas, 230.000
contagiadas, incluidas 50.000 profesionales de la Sanidad, y decimos
aprovechándose porque el Congreso y el Senado están medio vacíos, sin poder
funcionar y trabajar plenamente, esta pandilla social-comunista que nos
desgobierna quiere lanzar otra ley de educación, sin contar con los españoles,
que no podemos ejercer nuestro derecho a discrepar y disentir por mor del
estado de alarma, en el que estamos inmersos, que nos impide exteriorizar
nuestra disconformidad, desacuerdo y protesta.
Esta LOMLOE, nada tiene que ver con la educación y sí
mucho con la inculcación en la juventud de la ideología que todos conocemos, es
decir, de la apropiación por parte de este desgobierno de la “educación” de
nuestros hijos y nietos como prueba, por ejemplo, el impedir que se pueda
elegir un centro de enseñanza concertada.
Entre los “valores éticos” que quieren imponer, están
el feminismo, anticapitalismo, LGTBI, ideología de género, ecologismo,
supresión de la asignatura de religión, eliminación de reválidas, aprobar el
Bachillerato, aunque se suspenda una asignatura, etc, etc.
Ya decía Anatole de France que “Sólo se ejerce una
fuerte acción sobre los individuos apelando a sus pasiones o a sus intereses,
no a su inteligencia”. El que quiera entender que entienda.
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