domingo, 12 de agosto de 2012

"Como en Rusia"



Durante la II República española era frecuente oir la frase “¡Como en Rusia!”. Dicha frase no solamente se oía en la calle, sino también en la Cámara. Obviamente, esto quería decir que había que tomar a la Unión Soviética como referente para hacer las cosas igual que allí.

Aquella gente, totalmente engañada por la propaganda comunista, no sabía muchas cosas, como por ejemplo, el terror que se estaba sembrando entre la población civil. Así, el historiador Stanley Payne dice que "durante los primeros meses de enfrentamientos la mayoría de las bajas no provenían de combates en el campo de batalla sino de ejecuciones políticas en la retaguardia. Eso era el terror rojo".

Lo que tampoco sabía esta gente eran las hambrunas que padecía el pueblo soviético, aunque la propaganda decía que no había desempleo y que todo el mundo cobraba, aunque no pudiesen comprar nada porque todos eran dueños de todo.

Asimismo, tampoco sabían que nadie estaba satisfecho con el régimen, salvo la privilegiada nomenklatura. Y lo curioso del caso es que aún estando en desacuerdo con el modo de vida, todo el mundo votaba al sistema porque allí no había democracia, ni partidos, ni libertad, ni nada de nada. Así se derrumbó aquel terrible régimen totalitario y criminal.

El caso más paradigmático sobre esto, puede ser el caso del asesino de Paracuellos, ya saben, el hombre de la “brillante hoja de servicios”, que en aquellos tiempos de la República exclamaba: “Cada día es mayor mi amor a la Unión Soviética  y al gran Stalin”.

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog